Visita Improvisada ~ Privado

A pesar de lo mucho que Socrates odiaba a la gente, yo seguía haciendo mi esfuerzo por encontrarle muchos amigos, creo que uno de mis más grandes anhelos, era que un día mi grupo de gente pudiera convivir en paz y divertirse, aun cuando la mayoría de ellos tuviera sus diferencias, en el fondo, todos eran muy buenas personas por ello, creía que si todos ponían aunque fuera un poquito de su parte, podrían llevarse bien.

Kalle no era la excepción, así que en mi afán por fortalecer estos lazos, había acordado secretamente que nos veríamos en el dormitorio de Socrates para pasar la noche ahí, no podríamos desvelarnos tanto, puesto que a la mañana siguiente tendríamos que continuar de manera normal nuestras clases pero era algo que valía la pena intentar.

Esa noche, luego de terminar las clases nocturnas, llegué al dormitorio del semi-demonio, toqué la puerta, extrañamente, pues mis visitas eran casi siempre en los fines de semana, estaba algo nervioso y portaba el uniforme escolar, sabia que me mataría pero tenia tiempo, podía golpearme por una hora hasta que se le bajara el coraje y para cuando llegara Kalle, estaría más relajado.

-Socrates...- Alcé la voz con un cierto dejo de preocupación. -Estas ahí?-

No habia tenido un mal dia, pero tampoco podía considerarlo bueno. Las practicas de mana eran todavía un fracaso y no solo le pegaban emocionalmente, podia sentirse exhausto de intentarlo y no ganar nada.

Aquella noche esperaba bañarse, acostarse y probablemente jugar un poco de videojuegos.

El toque de la puerta se sintió como una patada en la espalda, solo podía ser una persona a esas horas y muy probablemente algo raro pasaría. Fenian tenia esa habilidad mágica para causarle las aventuras más extrañas y complicadas del universo. O probablemente no son complicadas pero terminaría haciendo algo que no le gusta o que no tenia intenciones de aprender.
- Por favor, que traiga una pizza... - dije mientras avanzaba a la puerta - Vooy~

Caminó hasta ella y la abrió, le daba gusto tener tan buena percepción e intuición.
- Hola chaparro o.o que haces aqui?

"Por que no le ponen seguridad a la fraternidad de creag? Que no son puros genios locos? ... "

-Hola Socrates!- Respondí inmediatamente después con una falsa efusividad y luego di otro paso al frente para estar un poco mas cerca del semi-demonio. Abrí los brazos y lo envolví con ellos para luego soltarlo y entrar en la habitación.

“Que le digo? Que le digo?” Pensé evitando mirarlo a los ojos durante todo ese lapso. No era tanto el hecho de como decírselo, eso era lo mas fácil, me quedaría a dormir ahí como ya era costumbre, lo difícil era como abordar aquella otra “situación”.

-Pues ya sabes, voy a pasar la noche aquí...- Le respondí, con el tiempo me había empezado a sentir cómodo en esta habitación, el sentimiento ya no era muy diferente a estar en la propia y como Socrates no tenia un 'roomie”, eso hacia las cosas mas fáciles para todos. -Oye, puedo decirte algo?- Allá iba otra vez.

-Pero solo si prometes no enojarte...-

- Cuando dices eso es porque dirás algo horrible en donde experimentaré alguna clase de incomodidad... - dije levantando una ceja y pokeandole la pancita. El chaparro tendía a meterme en situaciones de extremo cuidado, probablemente necesitaré mi nebulizador pronto....

- Bueno, al menos no es como si hubieras invitado a Kalle o algo así - respondí con un suspiro. Era lo último que quería en ese momento - Pero bueno.. ¿Cómo has estado? Pasale... la gente de Creag es bien rara y de seguro querrán experimentar contigo...

Cuando escuché lo de Kalle, abrí los ojos como platos y negué con la cabeza rápidamente... pero intenté disimularlo para que el semi-demonio no estallara, antes de tiempo.

En eso tenia razón, la gente de Creag era rara pero Socrates solía ser algo sensible a ese tipo de comentarios, así que incómodamente le asentí con la cabeza y di un par de pasos hacia adentro de la habitación, todavía sin decir nada al respecto aunque después de haber hecho tal revelación, había empezado a sentir una gran incomodidad.

Tan pronto escuché el click de la puerta, me di la vuelta para verlo de frente, sentía un sudor frío resbalar por mi frente y desvié la mirada mientras confesaba.

-O-oye...- Comencé. -En realidad si invite a Kalle...- Dicho esto y antes de que intentar salir corriendo o golpearme, me le eche encima para aferrarme de uno de sus brazos.
-Perdón!!! Perdón!!! Pensé que seria divertido y que podríamos jugar todos juntos!!! No te enojes!!!-

- Eeeeeeeeees reaaaaaaaaaaaaaaal?!?! - dije sorprendido - Pero sabes que él.. y que yo... agh!!

De todas las cosas que había hecho Noah Fenian, esta era la más horrible. Ahora no solo tenia que aguantar al chico de cabello azul gritando por todos los salones de las materias de primero, sino que ahora tendría que soportarlo en su dormitorio TODA LA NOCHE.
- Pero.. agh... AGH DIJE!! - sin poder agregar más paro luego rendirme - Pero bueno.. y donde esta??

Kalle llega corriendo a toda velocidad, pues había visto a Noah desde antes llegar a la habitación de Sócrates. El niño llevaba una mochila, una almohada y una liebre blanca de peluche.

-HOLA TAKATOOOO!!! OWO- dice Kalle al llegar a la habitación de Sócrates. El chico entra a la habitación con toda confianza y toma la mano de Noah para hacerlo pasar también.

En una mesita, Kalle pone su mochila y con ayuda de un hechizo de mana azul, podía cargar múltiples cosas en ella, así que sacó dos pizzas, tres sodas y una cajita con galletitas.

-Traje de comer

Kalle no se sentía incómodo, para él, Noah y Sócrates eran sus nuevos mejores amigos. Kalle se acerca a Sócrates y lo toma de las mejillas, estirándoselas.

-Gracias por invitarme a tu habitación!!! YEEEEEYYY!!!~♫

-Vamos! No es tan malo! Intenta llevarte bien con él!- Comenté poco antes de que Kalle hiciera su aparición y de hecho, cuando llegó, fingí que nada había pasado y le sonreí para luego darle una palmadita a Socrates y solamente le dediqué una sonrisa como diciendo “Todo saldrá bien...animo”

En eso, sentí el huracán aproximándose y avancé con él luego de que este me tomó de la mano, sentía mucha admiración por el grupo que se había formado en 5to y la verdad es que a mi también me gustaría hacer algo parecido, tener mi propio grupo de amigos, no, mas que eso, hermanos con los que pudiera divertirme y hacer cosas juntos...

-Hola Kalle!- Le salude y aproveché la propuesta para encaminarme a la mesa. -Pues vamos a comer primero! Y luego decidimos que vamos a hacer, te gustan los videojuegos?-