En busca de respuestas

La luz de la tarde entraba por las ventanas abiertas iluminando aquel amplio espacio lleno de estantes, mesas y sillas, Nick paseo por los pasillos de la biblioteca pensando en sus opciones de investigacion, ¨comencemos por lo obvio¨.

La luz habia bajado de intensidad al punto que fue necesario encender la luz de la mesita cercana al joven enfermero.

¨8:30, carajos, el tiempo habia volado, ¨Dogma Crucis¨ dijo en voz baja lleno de preocupacion, ninguno de los datos que habia conseguido no era tan util como el habia esperado en realidad solo despertaban mas preguntas y generaban mas preocupacion aclarando muy poco.

Nick encendio un cigarro y se levanto un momento, mas de tres horas habia pasado ahi sentado, al alejarse de la luz el resplandor naranja de su cigarro y la luz de la mesita era lo unico visible en la oscuridad de la biblioteca.

Miro por la ventana, las luces de los jardines abrian caminos en la oscuridad, se veia vacio salvo por los entes luminosos que patrullan la escuela.

Llevo el cigarro una ves mas a su boca y tomo una bocanada que dejo salir lentamente.

Dinero infinito, una basta cantidad de miembros en europa, inagotables recursos lgales y un lider carismatico, todo apuntaba a una fuerza imparable.

Las nueve almas afines eran la unica pista no disponible atraves de investigacion por medios mundanos, pero transcripcions de cuentos populars sobre un mago de la antiguedad con el poder de manejar las diferents manas habia sido la pista mas prometedora, puso una nota mental y guardo toda la informacion al respecto, cientos de paginas al respecto, sera una noche larga, nota mental dos, ocupaba cafe.

Termino su cigarro y regreso a la mesa, si los demas no sabian aquello tan simple las implicaciones de una ataque directo a esta organizacion solo auguraba mala fortuna, definitivamente esto no era algo que se pudiera resolver en una confrontacion final donde el ultimo en pie gana, no, no es tan simple..

De nuevo Nick reviso su reloj de pulso, 10:40, tomo la tasa de cafe y vio que estaba vacia, las ultimas horas las habia invertido en revisar articulos sobre juicios criminales sobre el manejo del alma, la creacion de seres con vida propia permanente y la division del alma, cada caso era mas sombrio que el anterior, los detalles eran grotescos, pero nada usable, en su mayoria habian ocupado sacrificar vidas de otras creaturas, siempre con resultados abominables que siempre eran destruidos por los consejos de magia a cargo de cada investigacion, los resultados sobre la division del alma eran aun mas escazos, estos eran negocios malos.

El reloj en la computadora marcaba la media noche, las incognitas le molestaban, pero la informacion que habia encontrado generaba preguntas mas intersantes que a primera vista.

Comenzo a apagar la maquina y la luz, tomo las ojas que imprimio y las hecho a su mochila, fotografias de magos varios estaban repartidos en mas de un centenar de ojas de informacion varia, al ultimo tomo la foto de Lumiere, el lider de los Dogma Crucis, lo mas impactante es que no habia nada sucio sobre el, era hora de comenzar a excavar sobre este sujeto y sus allegados, lo mas perturbador seguia siendo aquella entidad que le habia dado las visiones, otra incognita, era real o solo un cuento, era raro que en un mundo magico donde se puede hablar con los muertos y entes extradimensionales nadie habia visto a esta entidad y eso molestaba a Nick de sobremanera, creer en algo que no ves y no sientes era un concepto que solo entendia de las religiones mas antiguas de los humanos, pero a cierto punto siempre habia leyendas de intersecion divina, en el caso de ¨el mesias¨ no habia nada, demasiado conveniente.

La luz se apago por completo cuando la imagen de la pantalla se desvanecio, el joven enfermero se levanto y acomodo la silla en su lugar y se dirigio a la puerta, por ultimo solo quedaba una cosa por hacer, tendria que ayudar a Hazel con cualquir informacion que le pueda proporcionar, pero a estas alturas era seguro que no quisiera tener nada que ver con el no despus de esta tarde, tendria que ser por otro metodo mas discreto.

¨Buenas noches¨ el joven cerro la puerta de la biblioteca y se alejo caminando en los pasillos desolados del cuarto piso del edificio de ciencias.

La puerta de la biblioteca se abrio, de nuevo el interior de esta se encontraba en total penumbra, saber que estaba solo fue un alivio para el enfermero, cada pista sobre el culto le habian llevado a un callejon sin salidad, para una organizacion tan grande era imposible el esfuerzo que hacian en ocultar los nombres de sus miembros, sin embargo muchos de ellos son hombres y mujeres publicos, eso los traicionaba, en cada foto salian rodeados de posibles miembros del Dogma, almenos era algo a su favor, de seguro ya habrian cometido algun error solo era cuestion de encontrarlo.

Una vez mas Nick ocupo su lugar de la noche anterior, era curioso como nadie venia a esas horas, mejor para el.

Encendio la luz de la mesita y la computadora, mientras el sistema operativo cargaba se sirvio un cafe, esta prometia ser otra noche larga, habian demasiadas cosas que le molestaban de todo el asunto, ahora que Korven habia decidido meter sus cuernos en el asunto solo significaba que tendria que trabajar mas rapido, si lo que buscaban obviamente estaba aqui solo era cuestion de tiempo antes de un segundo ataque y las probabilidades de que hubiese alguien de ellos en las cercanias buscando el momento para atacar solo lo inquietaba mas.

Hasta ahora toda su investigacion se limitaba a especulacion educada pero era algo, almenos no todo habia sido una busqueda imposible, sus investigaciones sobre la carne y el alma habian arrojado notas interesantes pero nada definitivo aun, era posible que necesitara ayuda y solo habia alguien con el conocimiento para poder asistirlo, la posibilidad de solicitarle ayuda era algo que no queria, no despues lo que paso, no habia sido profesional, sus sentimientos le habian ganado.

Nick se sacudio, no podia pensar en eso ahora, su investigacion tenia el potencial de salvar a mas de uno, ni Furukawa ni Fado habian hecho nada cuando los estudiantes fueron atacados almenos pudieron enviar a su perro de ataque Kodran, era un hecho no son confiables, no se podia dar el lujo de tenerlos en otro concepto, ellos pensaban a lo grande, en el gran esquema de las cosas y mentes asi frecuentemente tomaban decisiones imposibles para los demas, decisiones que afectaban vidas o las terminaban como parte de su estrategia de ajedrez.

El resto de la noche paso tranquilamente, en un par de ocasiones se levanto a mirar por la ventana, era dificil creer cuan tranquilo estaba todo y que sin embargo mas alla de los confines del instituto alguien planeaba destruirlo todo.

Entrada la noche preparo mas cafe, apenas eran las once y la velada estaba lejos de terminarse pronto.

(Este post es antes de entrar a la oficina de Fado)

Un escalofrio recorrio el cuerpo despertandolo haciendole perder el precario balance que tenia al descanzar sus pies sobre la mesa que habia estado ocupando en la biblioteca, con un sonoro ¨CRASH¨ cayo al suelo de espaldas, la cabeza le dio vueltas, esa no era manera de despertar.

La media luz que entraba por las ventanas le hizo pensar que era tarde pero no sabia que horas eran, miro su muñeca pero se dio cuenta que su reloj pulsera no estaba, ¨quiza lo deje en mi oficina¨ suspiro.

Lentamente se levanto del suelo, recogio sus cosas poniendolas en una mochila, una vez limpia la mesa se acerco a la ventana, estaba amaneciendo, poco recordaba de la noche anterior, su estomago protesto pero tendria que conformase con lo que pudiese encontrar en su escritorio, no solo guardaba licor o vasos si no, pan, aceitunas y queso para cuando queria un martini o festejar solo....¨solo¨ dijo en vos baja mientras observaba el amanecer.

Solitario era un adjetivo que bien definia su entera existencia, recordar era un ejercicio que jamas habia disfutado y le habia traido mas crisis que beneficios anteriormente, sin embargo su investigacion de los ultimos dias le habia llevado en busca no solo de el porque habian sido atacados si no de las motivaciones de completos extraños, cosa que seria imposible entender se habia dado cuenta hasta poder entenderse a si mismo.

La promesa de un mundo nuevo y un nuevo comienzo era una propuesta sumamente tentadora incluso para el, el sacrificio de unos cuantos, ni siquiera tendria que mirar, podria decir que asi estaba predestinado a ser, que era la voluntad de algo mas grande que ellos y que no podian entenderlo, pero era demasiado conveniente incluso para el, este mundo le habia dado poco, no era un huerfano como los demas sin embargo sus padres se deshicieron de el antes de cumplir los doce y no los ah visto desde entonces, sin razon o motivo solo asi, despues de los quince habia dejado de preguntar si vendrian por el en navidad y solo habia aceptado que no era bienvenido.

Saco una cajetilla de cigarros del bolsillo de su chaqueta, tomo uno y lo puso en su boca, pero no se habia dado cuenta lo mucho que le temblaba, estaba llorando de nuevo, ¨demonios¨ por eso jamas era buena idea recordar mucho, pero quiza esta ves era necesario, las palabras de Furukawa aun hacian eco dentro de el, habia tratado de hacer que nada paso pero era inutil, ¨Y que es lo que necesitas curar, de ti, Nick?¨ la leccion de Furukawa no se habia terminado ahi, la boquilla del cigarro se humedecio con saliba y lagrimas.

Nick lo tomo y lo lanzo por la ventana mientras pensaba en lo ultimo que le dijo el director: ¨Piensa el por que quieres ayudar a la gente, por que deseas curar a los demas, que es lo que te motiva y si esa motivación no es solo un mecanismo de defensa para tus propios miedos. Espero que lo encuentres pronto y estar ahi para presenciar tu verdadero resplandor.. Nick Nickledime...¨.

Era tan obvio ahora, su eleccion de carrera, ser necesitado pero no tenia amigos, sus notas altas eran su busqueda de aprovacion pero no de una familia si no de extraños, sus ojos se abrieron grandes, el ultimo pensamiento le habia pegado como un martillo pero no tenia el valor de siquiera articular el concepto en su mente.

Lentamente la imagen de Clementine aparecio en su mente, sonriendo, los recuerdos de aquel dia en la enfermeria lo abrumaron, no queria creer que pudiese ser solo una ilusion creada en su cabeza, no estaba preparado para lidiar con eso no ahora.

Almenos parte del gato estaba fuera de la bolsa parcialmente, se habian sentido como años de terapia en una mañana, miro su reflejo en el vidrio y se vio a si mismo, mal comido, ojeroso y cansado, sus defensas mentales estaban tan bajas que fue facil llegar a esas conclusiones y ahora que lo veian directo a la cara no habia nada que pudiese hacer mas que aceptarse aunque era mas facil decirlo que hacerlo.

Se asombro al notar que en realidad estaba sonriendo, algo que no habia hecho en mucho tiempo, no era por orgullo, un falso sentido de superioridad u otra nimiedad.

Estaba consciente de lo mal que habia tratado a Hazel, el pobre chico esta pasando por un pesimo momento y lo unico que se le ocurrio fue comportarse como un zopenco, era algo que tendria que cambiar y pedir perdon tragarse su ya inexistente orgullo no seria problema, pero el daño ya estaba hecho, ojala lo pueda perdonar.

Incluso deberia de disculparse con Noah, no habia sido profesional, la forma en la que se comporto no fue digna, ojala el pequeñin sepa perdonarlo, si era necesario el mismo le enseñaria algun hechizo.

Clementine era otro cabo suelto, tendria que ser honesto con ella, o tragarselo todo, por el bien de su carrera, ya no era un niño, ya era un hombre y esa era una situacion que tendria que resolver como tal aunque no supiera como.

Hablar con Furukawa quedaba fuera de la ecuacion, aun no habia arreglado sus problemas era demasiado pronto, aun no habia hecho nada, con el hablaria al final.

Despues de pasar el rato meditanto viendo el amanecer Nick tomo sus cosas y decidio irse a su oficina, aun habia mas pistas que investigar y el tiempo no se detenia por nadie.

El joven enfermero habia cerrado la puerta de la biblioteca tras de si y comenzo a alejarse lentamente aun pensando en lo que habia reflexionado, bostezo y tropezo contra una planta en el pasillo dejando caer su mochila y el folder que llevaba consigo regando por todo el suelo apuntes y recortes de periodicos, comenzo a recoger tan rapido como podia, estaba demasiado cansado, al final una foto de una reunion de posibles miembros del Dogma en una funcion de beneficencia quedo a sus pies.

Nick miro la foto y al darse cuenta de lo que estaba viendo quedo helado, no podia ser, su boca quedo abierta, la foto era antigua de una publicacion de hacia treinta años, no era posible, ahi estaba Lumiere y Dylan Turunen, ahi estaba la relacion tan clara mirandolo ahi de frente a los ojos, habia leido ensayos sobre su trabajo, almenos la parte teoriaca, su claro desden por romper el tabu de crear vida de la nada y su admiracion por su trabajo era algo que no podia decir en voz alta, esto no se terminaba, tomo la foto y regreso a la biblioteca, esto se llevaria algunas horas mas, el desayuno tendra que esperar.

Lanzo su mochila sobre la mesa y comenzo a trabajar furiosamente, mas motivado que antes, estaba tras de algo y era grande, era vital que Hazel tuviera esta informacion lo antes posible, sus sospechas se confirmaban era seguro que habria miembros del dogma en el juicio, si solo pudiera obtener una lista de los presentes podria tener una lista de sus futuros contrincantes.

Tres golpes sonaron a la puerta. Eran golpes firmes, llenos de bastante molestia. Clementine había tenido que trabajar SOLA con los voluntarios por una semana, ya oficialmente había tenido suficientes faltas para recibir una suspensión, pero Clementine no trabajaba así, quería saber donde se había metido. Era el trabajo dificil de ser la madre de los polluelos.
- Mana Naranja: OPEN! - grita la enfermera comandando a la puerta a abrirse, esta sigue las ordenes abriendose con fuerza.

Ahi estaba él, casi metido en su computadora, con la cara mas funebre que haya visto. El pelo de Clementine se volvió mas potente que el claro rosado que siempre postraba y una pequeña vena apareció en su frente.
- Nicholas Nickledime, al fin te encontré... - dice caminando hacia él con paso apresurado - Tienes mucho que explicar...

Nick tomo sus cosas y las metio en su mochila, apago el monitor de la maquina y se volvio para ver a la doctora, ¨Esto era inevitavle¨ dijo en voz baja.

Mantuvo la calma, cosa que hubiera sido casi imposible bajo otra situacion almenos una mas alegre.

No se levanto, solo se quedo ahi mirandola, consciente de lo que venia, la imagen de un peloton de fusilamiento le paso por la mente, almenos a ellos se les daba la oportunidad de fumar antes de morir.

¨Ya me encontraste, aqui estoy¨. La miro fijamente, sus ojos claramente cansados sin animo de pelear esperando lo que sea que ella quisiera inflijirle, no levantaria las manos para defenderse, lo que sea que ella decida estaba bien, almenos la informacion que tenia en ese momento era suficientemente relevante para pasarla a Hazel y con algo de suerte al unirla a otras piezas la imagen tomaria algo sentido, de mientras solo quedaba hablar con Clementine un evento que no habia querido que pasara, penso en mentir por un momento, era excelente en ello, pero no era lo indicado almenos no esta vez.

Clementine llega hasta él y lo observa. Obviamente había notado como metía todo a su mochila, por lo que el maestro Fado tenía razón. Se quedó ahi, frente a él, escuchandolo rendirse completamente y levantar la bandera blanca por lo que solo bufó un poco.
- Y crees que eso es todo? Solamente eso me vas a decir? Pensé que en verdad te interesaba ayudar a los demás... así no lo estas demostrando...- dijo ella con los brazos cruzados - Los estudiantes estan teniendo colapsos por toda la presión de la escuela y la inseguridad del campus. Se supone que tu estas especializandote en psicologia.. ¿Donde carajos estabas?

No se trataba de lo que hiciera, si él no le quería decir estaba en todo su derecho, pero lo que le molestaba era eso, que simplemente dejó algo para hacer otra.
- Me sorprendes, Nick, después de tanto tiempo simplemente decidiste tirar la toalla? - pregunto ella - ¿Me estoy equivocando contigo después de tanto?

¨Podrias dejar de estar enfadada un momento, realmente necesito hablar¨ le dijo Nick.

Espero la reaccion de la doctora, suspiro y comenzo a hablar, ¨hace mas de una semana hable con el Director, fue por casualidad, pero el me presento preguntas sobre cosas que pense que sabia, no pude contestalars, eran sobre mi, pero no pude, estan pasando mas cosas en la escuela y el dia que te encontre sobre el pasto herida no pudo tomarlo mas, no decias nada y solo actuaste como si nada hubiera pasado, alguien te hirio y esta todo esto del Dogma, tenia que investigarlo, lo siento pero no podia dejar las cosas asi.

Nick tomo aire, y la miro de frente, ¨tambien estoy pasando por problemas personales, alguna vez te haz preguntado porque ayudas a los demas, eso fue lo que me pregunto y no pude contestar porque el que necesitaba ayuda todo este tiempo era yo, todo este tiempo solo queria que alguien me necesitara, no soy huerfano sabes.....solo me abandonaron aqui de niño, un par de años despues deje de preguntar si vendrian por mi porque me di cuenta que a nadie le importaba, todas mis notas, las altas espectativas solo han sido para ganar la aprovacion de extraños, no tengo amigos y no tengo familia, quiza dentro de mi algo me decia que si me necesitaban podria cubrir todo eso pero no es verdad, siento que haya sido ahora, pero quiero hacer las pazes con eso, nadie me ama, esta bien sobrevivire, no es algo que haya planeado, pero no estaba en condiciones de ayudar a nadie, Furukawa me dijo el secreto del color de tu cabello, tu eres especial, pero yo no, no creo ser tan fuerte.

Las explicaciones del joven enfermero se sentian por todo el lugar, definitivamente estaba pasado por mucho, aunque su explicacion no fuera tan buena, estaba notablemente cansado y emocional.

¨Perdoname, siento haberte defraudado, no fue mi intencion¨ dijo en voz baja, tratando de mantenerse fuerte, de no llorar, se mordio el labio, si seguia hablando en un estado tan vulnerable terminaria por decirle todo y este no era el momento, no ahora.

- Ah... - dice Clementine secamente - Con que era eso..

La mujer toma al hombre del pecho de su camisa, levantandolo y observandolo con bastante molestia.
- Y QUE SOY YO, PILTRAFA? - le dice la mujer furiosa, con los ojos cristalinos del coraje - Por que decides simplemente que estas solo? Por que si estabas pasando por todo esto no me dijiste nada? Donde quedo ese hombre que dijo que estaría ahi para lo que necesitara? Simplemente decidiste que no podías y decidiste que yo no podía estar ahi para ti?

Lo empujó hacia la silla y se dio la vuelta para golpear una de las columnas de madera que sujetaban los enormes estantes.
- Apestas a cigarro... que asco.. - dice apretando los puños, no quería llorar.

- ...Nick... - dice la mujer sin voltearlo a ver - Tu dices que soy una persona especial y tu no, creo que esas son puras estupideces... Yo tambien he vivido cosas horribles, tu dices que estas solo pero sabes que tus padres estan vivos aunque segun tu, no te quieran, yo vi morir al mio, después de que me dió clases por tres años sin saber que era él... Hablas de la soledad como un adulto, pero quieres que todos tengan compasión de ti...

- Como puedes pedirme que no este enojada contigo.. cuando estas haciendo lo mismo que todos... tomar tus problemasy alejarlos de mi... al final la unica sola soy yo, porque soy la unica a la que no la dejan ayudar.. ni tu, ni hazel, ni kodran...

La mujer comienza a hacerse pequeña, su cabello lentamente comienza a teñirse de negro mientras grandes lagrimas caen al piso, su cuerpo encogiendose mientras sus rodillas le fallan y comienza a caer...

Despues de haber hecho algo tan estupido, Nick sintio que su estomago se le fue a los pies, es real lo que esta pasando?

Nick ya no lo soporto mas y abrazo a Clementine, fuerte y no la dejo ir ¨solo queria protegerte, porque te amo¨ lo dijo en voz alta casi un grito.

Al sentir aquellos brazos y escuchar la declaración de Nick, Clementine sintió como su sangre se salió por sus tacones. Una sensación de agua fria cayendo precipitadamente sobre ella. El tiempo se detuvo por un instante... todo el sonido alrededor de ellos desapareció. Solo el latido de su corazón y la respiración de Nick cerca de ella era lo unico presente.
- Nick... yo... - dijo titubeante, fria, en realidad no sabía lo que estaba pasando. No entendía...

Fue entonces cuando su cerebro hizo ese "click" necesario.

Clementine pensó en todo lo que decía, la manera de mirarla, su sonrisa, su manera de tratar a los demas. La angustia de verla irse las noches al bar y todo ese tiempo que compartío con ella. Un ligero rubor se apoderó de sus mejillas y las lagrimas continuaron cayendo. El tiempo comenzaba a caminar una vez más.
- Yo... no sé que decir... yo...

Sin pensarlo, su mano descendió hasta la de él y se quedó ahi... paralizada...

Nick tomo su mano en la suya, habia esperado este momento por tanto tiempo que cuando lo dijo se sintio natural como si siempre hubiese sido algo que debia ser, se sintio flotar y la sangre se le subio a la cabeza el resto de su cuerpo le siguio, ¨siempre te eh amado, y siempre lo voy a hacer¨.

Sin soltarla se quedo ahi con ella, por un momento penso en besarla, pero antes de siquira reaccionar lo habia hecho, un beso suave en su mejilla, y apoyo su cabeza con la de ella, ¨eres todo lo que eh soñado¨.

Clementine sintió un escalofrio al posarse los labios del chico en su mejilla. Apretó ligeramente las manos sobre las suyas y se estremeció.

Era la segunda vez que comenzaba a ver a Nick como un hombre.. pero ella era una doctora y sobretodo, era tutora en el Instituto. No podía simplemente dejarse llevar por la soledad y ofrecer eso que él estaba buscando. Suspiró y volteó a verlo a los ojos. Con una sonrisa tranquila aun cuando sus ojos seguian derramando lagrimas.
- Nick... eres un hombre increible, eres más especial de lo que tu crees... y para una mujer, serías el hombre ideal, aun cuando tengas miedo o sientas debilidad. Eso es lo que te hace humano y es tu capacidad de salir adelante lo que te hace tan unico....

Sin pensarlo, Clementine se acerca al rostro del chico.. besandole la frente de manera tierna.
- Sin embargo, aun tienes mucho que crecer, tienes mucho que ver y aun cuando sientas algo tan hermoso como lo que me acabas de expresar, nuestros caminos estan muy distantes. No lo sientas como una decepción, probablemente si no fuera una maestra y tu no fueras un alumno muy probablemente aceptaría una cita contigo.. pero el destino nos ha puesto en estos caminos... espero que lo comprendas.

La mujer se levanta, levantandolo a él y lo abraza.
- Me preocupas, entiendo que estés preocupado por mi, que quieras aportar a la causa pero no tienes que hacerlo solo... Escuché por ahi que estas buscando quien te enseñe a pelear y esta bien, empiezo a comprender como funcionas y quiero ayudarte. Hablaré con un viejo amigo que puede enseñarte dos o tres movimientos, es algo rudo pero estoy segura que te servirá bastante. Pero con la condición de que volverás a tu puesto y seguirás con los estudios...

Una sonrisa se dibuja en su rostro.
- Una mujer se derrite por los hombres graduados con honores...

Diciendo eso, la mujer toma el brazo de Nick con fuerza y le sonrie cariñosamente.
- ¿Estas bien?

Nick sonrie, sabiendo que no estaba solo, que aunque ella jamas lo pudiera dejar de ver como a un alumno el jamas dejaria de amarla, que siempre seria especial para el, y que la esperanza era lo ultimo en morir, la vida esa mañana le dio mas de lo que esperaba, su alma estaba tranquila.

Al verse a su lado, con su brazo en el suyo dijo: Nunca eh estado mejor, gracias a ti, me curaste.