(FINAL) 3 de Noviembre - Parte 1

Jugadores:
- Noah
- Aris
- Taylor
- Maggie
- Hazel
- Sergeii/Gustav

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03 de Noviembre de 2012
Area Medica - 20:05

La lluvia había terminado...

Aquellas nubes grises seguian sobre el Instituto pero el agua al fin habia cesado de caer. Todo el ambiente en Furukawa estaba gris, las plantas rebosantes de alegria pero con un dejo de nostalgia por no ver al sol. Se podía sentir un viento helado, tetrico, más alla de la celebración del Día de Muertos. Todo estaba diferente, daba el sentimiento de un mal presagio, combinado con algo de incertidumbre por lo que viene.

Ese aire de incomodidad que da no saber a donde depara la vida...

Little Monsters ya estaba listo, un nuevo rancho trabajado por algunos miembros de Creag, con la ayuda de la OMST quien propuso dar un pequeño patrimonio para poder mejorar las instalaciones. Esta vez contando con sistemas de seguridad tan poderoso que el Instituto, aunque Furukawa y docente sabían que en este momento el Dogma los tenia vulnerables como polluelos en la mano. Había sido aquel día la cita para reunir a los niños que divagaban por el Instituto con sus hermanos y familiares para poder volver a tomar su lugar alla.

Aria quien volvía a tomar las riendas como Directora de Little Monsters mantenía un rostro tranquilo y serio en lo que los niños comenzaban a reunirse en el area medica. Por alguna razon se sentía algo tranquila de poder evitar ver tantos soldados de la OMST (llamados "Peones") deambulando por ahi. Sentía que en los pasados días la cantidad de peones había aumentado, pero tal vez solo era su cansancio. Observó a lo lejos una cabeza plateada, Noah Fenian quien no soltaba a su hermano y este parecía estar acostumbrado y podía sentir que Taylor Kluivert traia a su hermana a paso apresurado. Sinceramente dos de las personas que agradecía que ya no formaran parte de su alumnado. Uno por buscapleitos y otro por travieso. Suspiró un poco en ausencia y deseos de un cigarro y se cruzó de brazos. Aun con la elegante gabardina que portaba podía sentir ese frio molesto. Algo no estaba bien y el clima lo intuia.
- Anciano, algo no esta bien... ¿Lo sientes? - murmuro al aire mientras ve la densa nube casi negra sobre Furukawa. Ese cigarro comenzaba a llamarla lentamente...hasta que desvió su mirada para atrapar a un peón observandola y disimulando lo contrario. Soltó otro suspiro y caminó para seguir su trabajo.

Caminó hasta donde Fenian y le puso una mano en el hombro. Sus ojos directamente clavados en él.
- Fenian, pueden venir conmigo? Hay algo que deseo discutir con ustedes. Los puedo ver en la oficina de Clementine?- dice la profesora sin esperar respuesta y comenzar a andar hacia el lugar destinado - No tarden...

* * * * * * * * * *
03 de Noviembre de 2012
Edificio Central - 20:05

Hazel corría con fuerza por los pasillos del Edificio Central, aun siendo alrededor de las ocho de la noche todavía podía toparse con varios alumnos. Los peones parecía tener aun más seguro el Instituto lo que pone a mas de uno a pensar si estaban bajo un ataque o algo así. Todo parecía tranquilo hasta llegar al area administrativa donde se encontraba la oficina del Director. No sin antes pasar por la sala de espera donde tres peones esperaban tranquilamente cualquier orden. Daba un sensación de estar custodiando algo... o alguien...

Al llegar ahi, estaba Furukawa checando algunos papeles, como siempre, con la diferencia que en vez de ese rostro amable y feliz ahora portaba uno serio aunque tranquilo.
- Joven Korhonen... ¿A que debo su visita? - respondió tranquilo, maquillando su rostro nuevamente a uno amable y feliz. - ¿Problemas con Sinmara?

Quería decirle que no se lo llevaría pero después de la pelea que había tenido con Aria y donde esta ultima había salido victoriosa no tenia precisamente los argumentos para hacerlo, tragué saliva y todavía un poco fastidiado le asentí con la cabeza aunque esta ultima ya se me había adelantado, no me gustaba ser el primero en estas cosas pero supongo que después de lo que había pasado era su manera de castigarme o castigarnos a ambos...

-¿Vamos?- Pregunté al menor pero tampoco esperé su respuesta y empecé a caminar tomándolo de la mano. No es como si tuviéramos mucho que hacer a menos que fuera otro intento de escape. La profesora se nos adelanto bastante, al grado de que después de doblar algunos pasillos y distraernos otro poco llegamos a perderle de vista, sentía algo de nostalgia al tener que despedirme de Aris, había tenido un muy buen mes a pesar de la tragedia...

En pocos minutos, ya estábamos frente a la puerta de la doctora Clementine e inevitablemente deje escapar un suspiro mientras de reojo, le dedicaba una mirada al niño. -Aquí vamos- Comenté colocando mi mano encima de la perilla y luego haciendo otro puchero.

-Iré a visitarte, lo prometo- Dije como si el fuera el que necesitara calmarse. Finalmente abrí la puerta y luego de que pasamos mire a la directora frunciendo un poco las cejas.
-¿Qué pasa Directora?-

Sinceramente comenzaba a cansarme todo esto. No me gustaban las despedidas pero Aris prefería mil veces que todo acabara rápido a estar llorando. No es que no vaya a extrañar a Noah, le encantaba estar con su persona favorita de todos los tiempos... pero en verdad no le gustaba que se partiera tanto por algo tan sin chiste... de todas maneras lo seguiría viendo entre semana.
- Shi - dijo tranquilamente como aceptando que él era el que necesitaba tranquilizarse - Estaré bien.. no te preocupes x3

Caminaron como había dicho la Directora hasta la oficina de la Doctora de pelo rosa bonito. Tal vez iba a pedirle una paleta o algo así, tomaría una para Maggie quien de seguro no tardaba en llegar. El niño camina dando saltitos agarrado de su hermano. Se sentía muy tranquilo y feliz tomandole de la mano.
- Crees que llegue Maggie? :3 ya la quiero ver X3 Su hermano no me deja acercarme mucho ... - dice el pequeño semidemonio haciendo un puchero y frunciendo el ceño, Taylor era el enemigo numero uno siempre.

Taylor no le daba el tiempo al tiempo. Desde que Hazel y Gustav/Oso habían dejado su habitación había intentado despertar a Maggie pero sin ningún resultado. Comenzaba a angustiarle al grado que ahora corría a la enfermería para que le ayudaran.
- Mags! Despierta! Esto ya no es gracioso.. - dice avanzando hasta el edificio donde todos los niños se reunen. Alcanzó a ver que la profesora Aria se metía al edifcio, sería mejor seguirla.

Avanzó en dirección a la oficina de Clementine y al llegar vió que estaba muy concurrida. NO importaba mucho puesto que su hermana seguía en ese profundo sueño.
- Doctora! Algo le pasa a mi hermana! Por favor ayudeme! - dice Taylor intentando no perder el control - No puede despertar después de que parece que uso poderes que jamas había manifestado...

Comenzó a explicar un poco sin mencionar que Sergeii era Gustav mientras la recostaba en uno de los diván de la doctora. Comenzaba a respirar un poco más alterado de lo normal.
- Ayudela por favor...

Justo cuando Aria iba a explicar a Clementine por que estaba ahi y no con las enfermeras voluntarias, Taylor entra arrazando con cualquier dejo de silencio y hablando sobre su hermana. La Doctora estaba acostumbrada a estos casos de Pánico y solo tomó su estetoscopio mágico para acercarse a la niña.
- Calma Taylor - le dice cortantemente al demonio - Permiteme...

La Doctora comienza a dar un chequeo general de la niña, abriendole los parpados y pasando algunos hechizos sobre ella. Inmediatamente se dió cuenta que estaba fuera de peligro, solo terriblemente exhausta.
- Parece ser que utilizó mana por si sola, una gran cantidad que la dejó completamente drenada - dice ella guardando sus herramientas - No se preocupe, Capitán, ella estará bien, solo que su sistema de regeneración de mana es muy joven y regenera con poca frecuencia...

Observó a Noah Fenian y a su hermanito. Intentando calmarlos con su mirada.
- La pequeña estará bien en unas horas, será mejor que la dejen dormir. Le pondré un hechizo estimulante de mana para que despierte como nueva.. ¿Les parece? Ya quiten la cara larga y sobretodo... ¿Que sucede profesora?

La mirada de Clementine va directo a Aria, quien normalmente no irrumpe en oficinas porque si.
- ¿Sucede algo?

-SENSEI!!- grita el chico con una enorme sonrisa en la cara, traspasando el umbral de las enormes puertas de la oficina sin poner atención a lo que había dicho el director para darle la bienvenida -Volvió!! Gustav volvió! Está vivo!!- dice corriendo hasta el escritorio del profesor y tomando al oso que seguía viajando en su cabeza entre sus manos para mostrárselo al Director.

-No sé cómo pasó, ni cuándo, pero volvió!! Háblale, Gustav!- le ordena el chico emocionado al que alguna vez fuera ese enorme defender de implacable metal. -Pasó por la brecha, Sensei! Volvió de ella!- agrega finalmente impetuoso. No reparó en que tal vez estaba hablando demasiado fuerte y que alguien fuera pudiera escucharlo. Sólo necesitaba respuestas, necesitaba saber qué pasaría con Gustav, necesitaba que Keitaro Furukawa se diera cuenta que tal vez las cosas no eran tan malas como todos habían pensado...

EL movimiento brusco de Hazel me mareo un poco "ya puedo tener ese tipo de sensaciones otra vez, interesante" pensé mientras veía tanto al cap't como al director. -No me ordenes de esa forma, que si lo iba a hacer ¬¬- Aunque sentía que me oía grosero, me salio natural esa frase, me cuesta mucho ser yo cuando Gustav era un poco diferente a mi. Con la patita le pedi al capitán que me pusiera en la mesa, una vez ahí me incorpore, y puse mis brazos en la espalda, con la mirada abajo sin ver al director.

-H-hola dire... Si soy yo, bueno... siempre eh sido yo, pero el yo que estuvo en furu toda la vida. Soy Gustav...- Me costaba trabajo pensar en como decirlo sin que sonara a complot o algo así. Me acerque a Profesor, no podía llorar, pero sentía una horrible sensación en la barriga, y en la garganta, como si estuviera cerrándose. -L-lo siento, por lo que hice... pero tenia que hacerlo.- Dije un poco soyosante, aun cuando hice lo correcto, lastime a muchos por eso.

-Y si, me regresaron de la brecha

Aria camina alrededor de Maggie quien ahora descansaba en el diván, era bueno tener a Taylor cerca puesto que las cosas probablemente lo necesitarían.
- Clementine, podrías llamar a tu asistente? - dijo mientras cerraba las ventanas y ponía un hechizo en ellas - No estoy muy segura, pero creo que algo raro esta pasando con los peones de la omst... Llamalo sexto sentido o estar muy acostumbrada a estas cosas, que no puedo dejar de pensar que estamos dentro de una trampa...

Aria Nightwolf era conocida por su percepción, tal vez debajo de sus poderes de ilusión, su potencia a la hora de invocar, su gran poder provenía de su capacidad de intuir ciertas cosas antes de que sucedieran. Muy probablemente no al grado del Profesor Fado que podía ver el Futuro, pero a su manera de ver, siempre util.
- Tengo desde hace unas horas sintiendo una perturbación en el campo protector de Furukawa... Algo le pasa al viejo... pero no quiero poner a Fenian en peligro... - dice la mujer viendo por la ventana en un tono muy serio - Mi deber es protegerlos... ante cualquier peligro...

La nube encima de Furukawa parecía estar molesta. Los relampagos que soltaba demostraban que la verdadera tormenta estaba a punto de comenzar....

* * * * * * *
El Director golpeó su escritorio con fuerza, como una manera de interrumpir al oso parlante y de detener al joven de hablar. Todo había sido tan rápido que necesitaba tiempo para ordenar las ideas. Observó a ambos y luego dirigió su mirada al objeto de peluche. ¿En verdad era Gustav? Furukawa podía sentir un aura similar dentro de él pero había sido mal momento, muy mal momento para hablar.
- Por favor, Korhonen, modere lo que dice, hablar de "ese lugar" no esta bien visto por el consejo de magia y tenemos a la gente de la OMST aqui, no es por quererlo desanimar pero toda el Instituto esta aqui por usted, todo lo que diga puede ser usado en su contra...

Furukawa se veia menos tolerante y menos amigable que otras veces. Observó un poco al oso y luego lo levantó. Pudo sentir el alma de Gustav ahi... pero.. ¿Como?
-Este no es momento para pensar en esto - se dice a si mismo - Hazel, necesito que me hagas un favor... necesito que vayas al area medica y busques a Noah Fenian.

Un potente chirrido se escucha en la cabeza de Furukawa haciendolo estremecerse. Este aprieta al oso por un momento de manera tensa y luego se relaja.
- Quiero que te quedes a su lado, pase lo que pase.. ¿De acuerdo? - dice con esa sonrisa amable de siempre- Ahora ve! Yo disutiré con el oso y lo tendré aqui, no pierdas el tiempo y ve!

Unas gotas de sudor recorren la frente del Director mientras este mueve su mano y una especie de simbolo aparece en la puerta. Al abrirse se puede ver hacia afuera, como si la puerta ahora conectara con la salida del edificio central. Con otro movimiento el Director hace que el australiano comience a moverse hacia la puerta.
- Te lo encargo ... - dice Furukawa dejando caerse en su silla y observando a Gustav - Gustav, si eres tu, espero me disculpes pero estamos a punto de tener un evento ligeramente importante... por favor intenta parecer un oso.. no te muevas por favor.

Dicho esto, Keitaro sienta al oso en su escritorio mientras cierra la puerta magica y quita el hechizo. Inmediatamente después de eso, las puertas se vuelven a abrir y varios miembros de la OMST comienzan a entrar a la prestigiada oficina. Uno de ellos en particular entra quitandose el pesado casco que evita que se vea la mitad de sus rostros. Esto hecho por la OMST para proteger de hechizos de visión y otras cosas, así como para mantener el anonimato de sus fuerzas. Los ojos de este hombre de cabello rubio estaban inhundados en sangre asi como su piel extremadamente palida y sus labios rojos. Una sonrisa sarcastica dibujada en su rostro mientras toma una silla. En su frente, aquel sello que muchos pudieron encontrar en el cuerpo del pequeño Elijah cuando el suceso de la destrucción de Little Monsters.
- Me da un gusto poder platicar contigo, Keitaro Furukawa - dice la voz grave y potente .
- Lumiere Brandorff, me parece bastante acogedora tu visita... ¿En que te puedo ayudar? - responde Furukawa intentando mostrarse tranquilo - Veo que ni siquiera la OMST puede con tu interesante habilidad de transmigrar las almas de tus subditos... Parece ser que esta vez no pude anticipar tus pasos.
- Me halaga Director Furukawa.. ¿O puedo llamarte Keitaro? - dice el hombre cruzando las piernas - Verá, el motivo de mi visita es para poder conversar con usted. Han sido ya varias veces las que he intentado acercarme pero parece ser que su personal es algo... insistente en mantenerlo a usted aislado. La primera vez confiscandome algo muy preciado para mi - dice recordando como el Profesor Joe y el Profesor Fado se deshicieron de La Curtana, la poderosa espada que consume el alma - y la segunda vez, cuando pensé que estaban tan ocupados con el pequeño incidente de su rancho, la hermosa señorita Marxvelt me hizo el favor de acompañarme a la puerta.

Un suspiró provocado por aquella maravillosa mujer le hizo perder un poco la atención hasta darse cuenta que podría ser considerado una descortesía. Furukawa mientras toma al oso y lo hace levitar hacia una repisa, a manera de educación por tal interesante conversacion.
- ¿Gustas algo de beber? - pregunta el Director sin moverse de su lugar - Probablemente las transmigraciones de almas deben de afectar mucho los cuerpos de las personas.
- Te lo agradezco, Keitaro - responde Lumiere volviendo en sí - pero esta tecnica ha sido desarrollada para mantener el cuerpo en optimas condiciones... en realidad me gustaría poder compartir este maravilloso descubrimiento hecho por un buen colega, pero su tiempo se acaba, Keitaro, y vengo aqui a terminar esto de manera tranquila y sin problemas. ¿A usted le gustaría eso?
- Por supuesto que me gustaría y me alegro que se haya tomado la molestia de venir hasta aqui para hacermela saber - responde el Director con una sonrisa - Soy todo oidos entonces.

Lumiere sonrie ante la amabilidad de Keitaro y lo mira fijamente con aquellos ojos hundidos en sangre. Probablemente ante el gran peso del alma de Lumiere que ni siquiera el cuerpo de ese hombre habia podido soportarlo por tanto tiempo. Tantos meses en cautiverio.
- Noah Fenian, el gorrión - dice tranquilamente el posesionado - Entregueme al pequeño y no volverá a saber de nosotros, al menos, hasta que se logre a cabo mi cometido. En cuanto a mi me concierne y mientras no tenga mas gorriones aqui, nuestra discreta guerra no tiene motivos, por lo que no solo le estaría haciendo un favor a usted, sino tambien a los pobres padres que esperan que sus hijos tengan un refugio aqui. ¿Que le parece?
- Me parece bastante convincente.. - dice Keitaro acomodandose los lentes - sin embargo veo una pequeña incongruencia en su propuesta.. ¿Puedo llamarlo Lumiere?

-... O le gustaría que le llamara por su nombre real? - responde el Director observando fijamente al hombre posesionado. Este baja su sonrisa y toma un rostro serio, mientras que Furukawa mantiene su calma. - Usted me dice que mis estudiantes y mi Institución no tiene nada que ver con esto, pero, ahora que nos hemos quitado de formalidades, tu estas intentando arrebatar a uno de mis estudiantes, sea un gorrión o no, del privilegio de la vida, de una oportunidad de formar parte de una sociedad y sobretodo de seguir el legado del maestro de mi maestro, Aerthes el Primero. ¿Cómo cree usted que podría yo aceptar esa propuesta tan facilmente? Me sentiria ligeramente ofendido... ¿Como dijo que podía llamarle?

- Lumiere esta bien.. - responde seriamente el hombre posesionado, observando fijamente a Furukawa. Al romperse aquel momento de tensión, Lumiere solo suelta un suspiro mientras se encoge de hombros, como un hombre decepcionado por no conseguir las cosas como el quiere - Es una lastima que mi propuesta no haya llenado sus expectativas, Keitaro, no me queda otra opción mas que seguir con mis planes entonces...
- Creo que es lo mas conveniente, Lumiere, lamento no poder estar de acuerdo con usted.

El hombre posesionado se levanta de la silla y camina hacia la puerta al momento que todos los miembros de la OMST comienzan a salir.
- Yo tambien lo lamento... - dice sin voltear a verlo, parado en el umbral de la puerta - Espero tener una amena charla con usted nuevamente, por el momento creo que mis niños han comenzado a moverse, yo creo que debería de darse prisa o no habrá necesidad de negociar nuevamente. Que tenga usted una linda noche.
- No te preocupes, Lumiere, yo tambien tengo fé a mis niños, no hay necesidad de adelantarse a los hechos. Una linda noche para usted tambien.

Una sonrisa se dibuja en el rostro de Lumiere mientras camina por la puerta que azota con fuerza. Keitaro observa aquel umbral por un instante y suspira, para luego regalarle una sonrisa al osito en su repisa.
- Podría pedirte un favor? ^^ Podrias buscar a la Subdirectora Caroline? Dile que es de caracter- nggg...

No pudo siquiera terminar la oración cuando el director sintió una vez mas una temible punzada en su cabeza que lo hizo hundirse entre sus hombros. Se trataba de un potente ataque Psiquico capaz de sobrepasar tanto su barrera como la del profesor Fado.
"Ha sido un hueso duro de roer, Director Furukawa, durar tanto tiempo recibiendo un ataque tan poderoso... mis mas cordiales respetos. Pero ya no tengo tiempo que perder, las fiesta va a comenzar y usted tendrá que perderse la apertura.."

Keitaro sonrié aun con dolor en su expresión mientras abre la ventana con su poder y hace volar al oso.
- No te preocupes.. ya me encargué de todo, ahora podemos divertirnos sin problemas.. - responde el Director antes de caer sobre su escritorio, completamente inconsciente...

Bajo las oficinas administrativas, con gran paso todos los peones de la OMST comienzan a dirigirse a las fraternidades, el area medica y todos los lugares con alumnos. Lentamente comienza a abrirse la siguiente puerta del nuevo ataque a Furukawa...

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Nota del GM:
Abriré diferentes posts en diferentes lugares de la escuela, ustedes, miembros de fraternidad y maestros tendrán que buscarlos para poder postear. Les deseo buena suerte y feliz chapter finale!!

El asistente de la doctora comenzaba a hacer su camino de regreso al consultorio, habia parado por una de las casas para asegurarse del estado de uno de los alumnos de primer grado, un simple resfrio eso era todo, pero era su obligacion tomar las cosas que su superior le delegaba.

El ringtone de la marcha imperial sono en su bolsillo, ¨mensaje de Clementine¨ penso.

Se detuvo un momento y tomo su celular, mientras observaba el mensaje, le tomo un santiamen escribir la respuesta ¨voy para alla¨......(mensaje enviado)

Acelero el paso.