If you are afraid to lose...you have already lost

Todo el día se me había pasado bastante lento y no porque las clases fueran aburridas, eso no tenia nada que ver, era solo que me costaba mucho trabajo poder contener mi emoción por presentarme ante el equipo de Mugby, creo que para ser un niño, ya podía pararme frente a un estrado y dar una explicación científica acerca de la ansiedad, pues durante todo el día, no hubo otra sensación que atacara mi cabeza, constantemente tuve que ir al baño ante el fastidio de muchos de los profesores, sin contar que no había sido capaz de responder una sola pregunta acertadamente, no era mi culpa! En serio no podía concentrarme...

Y si, todo el día estuve comiendo chocolates y dulces, apenas llevaba una semana como estudiante y me quedaba una miseria de efectivo, lo mas seguro es que iban a retarme por ello y con su debida razón, tenia que admitir...

Cuando llegó la hora, decidido fui apresurado a la cancha de Mugby, llegué volando con alguno de mis spells y estaba listo, llevaba puesto el uniforme deportivo con el casco descansando en mis caderas mientras lo abrazaba con un solo brazo. Entré en el edificio y vi a lo que suponía era uno de los jugadores, era el único en la cancha, el único que estaba practicando y de hecho poco después de acercarme, lo reconocí de inmediato...

-HOOOOOOOOOOOOOOOOLA!!!- Le grité desde la distancia con mucha emoción y efusividad, ya estando ahí, era algo imposible de esconder para mi.

-Soy Noah Fenian, me inscribí como Carrier para el equipo de Sal, me dijeron que el puesto estaba disponible y que solo debía hablar con el capitán del equipo, MUCHO GUSTO TAYLOR!!!-

Taylor habia llegado temprano ese dia, no tenia nada que hacer fuera de clases y estaba ansioso por ver al nuevo Carrier que llegaría. Después de la decepción del Carrier del año pasado juró ser mas exigente, no podia dejar que Srad se llevara el campeonato este año.

Comenzó haciendo lagartijas con una mano cuando escucho un "HOOOLAAAAA" muy estridente. Volteo y observó a un niño albino que sonreia como si lo conociera.
- Ah, un fan de Little Monsters o me equivoco? - dice el Portier sonriendole y despeinandolo - Quieres un autografo??

Algo no estaba saliendo bien ahí, evidentemente no me había escuchado, si, claro, eso debía ser... hice una especie de puchero/gesto no muy agradable mientras escuchaba las palabras de quien según yo, era el capitán del equipo de Sal y hasta donde sabia, era uno con una muy mala reputación, pero eso no importaba, ahora estábamos del mismo lado.

-Uh...- Toci un poco tratando de matar un poco la conversación o al menos retomarla y evitar lo que empezaba a hacer un malentendido.

-Taylor...no soy un fan...- Le dije enarcando las cejas y en un tono mas serio, luego le volví a sonreír ampliamente, estaba a punto de darle una “gran” sorpresa.

-Yo soy parte del equipo, me inscribí como Carrier este año-

- ... Perdon? - dice Taylor extrañado por la respuesta del niño. Comunmente no tenian esa reaccion con el. - Claro pequeño, algun dia vas a crecer y podras ser un excelente Carrier!

Taylor comenzaba a incomodarse por el muchacho, lo unico que queria era que llegaran sus nuevos compañeros.
- Eres el hermanito de alguien?

Yo solamente solté un suspiro, tenia que estar bromeando, no había forma de que esta vez no me hubiese escuchado, pero no iba pelearme con él, tenia que estar tranquilo, después de todo, estaríamos en el mismo equipo, no había razón para empezar con el pie izquierdo, así que traté de ser paciente, sin contar que... me gustara o no, Taylor seria mi capitán...

Le jalé uno de los brazaletes. -No, Taylor, yo soy el nuevo carrier de Sal me dijeron que hoy era la primera practica y que tenia que venir a presentarme con el equipo!- Le volví a repetir.

Luego le extendí la mano para estrecharla -Mucho gusto, soy Noah Fenian...-

Taylor primero sonrio, como si todo se tratara de una broma... luego se le quedó viendo como diciendo "Es una broma, verdad?" y luego comenzo a fruncir el ceño.
- Que clase de idiotez es dejar que un niño de primero jugar como Carrier de Sal... ¡Eres como del tamaño del balón!

Taylor se cruza de brazos y se molesta, comienza a caminar lejos del niño.
- Lo siento, pero no aceptamos camarones en el Mugby - dije.

"No voy a depender de un niño mión..."

-Oye!!!- Reclamé casi de inmediato y empecé a seguirlo, desde cuando EL decidía quien entraba y quien salia del equipo, sabia que Taylor era el capitán pero eso era demasiado, en cualquier caso, NECESITABAN un carrier para poder jugar y hasta donde yo sabia, no tenían uno y no podían jugar sin él.

-NO ES CIERTO!!! Y DE TODAS FORMAS TE FALTA UN CARRIER!!!- Le grité, tal vez no sonaba como la mejor excusa del mundo pero...era cierto.

-Ademas ya me inscribí y me aceptaron...- Le dije plantándome enfrente de él con el ceño fruncido.

Taylor observa detenidamente al niño..
- De que comarca saliste? - pregunta acercandose a su rostro, viendolo retador y dandole un gañutazo en la frente - Ni siquiera aguantarias un dia jugando Mugby... es mas... de seguro nunca has jugado...

El portier comienza a caminar lejos del niño. Hasta su olor a niño le repudiaba.
- He comido lonches mas grandes que tu... crees que podrias ser un carrier? Ya te asustaron diciendote que experimentas dolor y muerte cuando juegas?

-Soy de Little Monsters, bueno... ya no, pero tu entiendes!!!- Le dije, no es como si no me hubiera visto ahí, bueno, tal vez no me había puesto mucha atención en ese entonces pero yo juraba haberlo visto ahí, incluso lo había visto en sus partidos contra Srad y todo eso, por algo lo “conocía”.

-Claro que si aguantaría, los he visto jugar y ya me dijeron todo lo que hay que saber, no vas a asustarme con eso...- Le dije tratando de sonar retador a pesar de lo mucho que estaba empujándome, seguía ahí persiguiéndolo y plantándome enfrente.

-Ademas, el primer día de clases pelee contra uno de los monstruos que ataco el Instituto!-

- Y que? ... eso no me dice nada - responde Taylor acercandose a su mochila - Pero bueno, menos palabras y mas accion.

El portier le lanza unos brazaletes que brotaban un aura de color gris. Taylor toma otros y saca un balon de Mugby el cual parecia tomar con unos guantes especiales.
- Pues bueno, si en verdad quieres ser carrier tendras que meterme un touchdown... y si no... me pagarás una cena y creeme.. no querras pagarme una cena.

El jugador de Mugby camina hacia un pequeño panel en el piso y hace salir una base con un area de touchdown. Deja el balon en el piso justo a la mitad del campo y el toma su posicion.
- Cuando tu digas...

Ponerme un reto donde tenia que anotarle un touchdown al mejor portier de la escuela no era una idea muy inteligente, pero estaba en una situación en la cual no podía decir que no o quedaría como un cobarde y probablemente mi futura posición como carrier quedaría bastante comprometida, seguí con la misma expresión del principio...

No sabia que decirle, no estaba nervioso pero me sentía en desventaja, Taylor tenia muchos puntos a favor, tenia razón, nunca había jugado...

Lentamente y con algo de desconfianza fui colocándome los brazaletes, al menos conocía juego de palabra, claro, gracias a ellos se crearía un cuerpo falso que estaría conectado a mi y tendría mis habilidades, ahora, solo tenia que salir del campo...
-Estoy listo...- Contesté a Taylor y lentamente empecé a caminar hacia la salida del campo, lo miré una ultima vez y luego cerré los ojos y sentí un cosquilleo en el estomago, eso si no sabia si era parte del proceso o ahora si empezaba a ponerme nervioso.

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Cuando volví a abrir los ojos, ya estaba dentro del campo, no sentía nada fuera de lo común, era yo mismo, volví la mirada hacia los alrededores y ahí estaba yo, otra vez, parado ahí fuera del campo con los ojos cerrados...
“Que raro...” Pensé sin poder quitar la vista de mi mismo. De hecho, empecé a caminar hacia allá pero sin salir del campo obviamente, luego volví la mirada hacia el portier...

-Estas listo?-

- Bien! Comencemos! - dijo el portier levantando las manos y haciendo que una concentracion de energia celeste saliera de ellas.

- Mana Negro: Magical Flying Disc!

Dos discos de mana celeste comenzaban a rodar en cada una de sus palmas, para luego dar un giro y lanzarlos a gran velocidad en dirección a Noah. Una sonrisa se dibuja en el rostro del Portier al tronar los dedos y los discos se vuelven 4.

"Adios brazos y piernas... un viejo truco .. jeje.. "

Ni siquiera me dio tiempo de acomodar mis ideas, todavía no terminaba de salir de mi asombro por ser mi primera practica de Mugby cuando los discos se abalanzaron sobre mi, no traté de evitarlos, no estaba preparado para ello pero parecía ser que el Mugby era mas real de lo que pensé.

Dos de los discos se abalanzaron sobre mis brazos y en cuestión de segundos, los había perdido...-AaHgh!!!...- Grité con todas mis fuerzas al sentir un dolor tan intenso que me hizo retorcer, era aun mas doloroso que lo que había sentido cuando me atacó el monstruo y cuando estuve a punto de caer al piso rendido, un tercer disco, arrancó mi cabeza.

-AAAAAAAAAAAAAAAAGHHHHHHH!!!!- Volví a gritar volviendo a mi yo real, abriendo los ojos de golpe con algunas lagrimas en ellos y caí de espaldas al piso con mi propio impulso, empecé a jadear por el “susto” y pronto me di cuenta que nada de eso era real pero parecía, se sentía como si lo fuera, me calmé y poco a poco mi respiración fue volviendo a la normalidad.

“Diablos, Hazel y Sebastyan tenían razón...”

No dije nada, solo me fui levantando lentamente y miré a Taylor con un gesto serio, sequé mis lagrimas y le sonreí, ahora entendía que no estaba jugando y aunque mis rodillas temblaban esto apenas comenzaba... solo había dado un paso en falso pero no me rendiría.

-Eso es jugar sucio...me atacaste cuando no estaba poniendo atención...- Dije volviendo a entrar a la cancha.

-Mana Azul: Arat Diet!!!- Murmuré al momento en que me cubría con un aura dorada y avanzaba a gran velocidad hacia la pelota, la tomé y seguí con ese mismo impulso hacia la portería de Taylor, todo iba bien hasta que empecé a sentir como mi energía era drenada, sabia que eso pasaría tarde o temprano pero lo que no esperaba era que esos 10 segundos duraran tan poco...

-Diablos...-

Al menos, gracias a eso ya había calculado cuanto espacio podía abarcar con mi poder, antes de que se desvaneciera...

Justo cuando ve que el chico aumenta su velocidad logra sorprenderlo. En realidad sabia hechizos? Tal vez lo había subestimado un poco. Pero una prueba es una prueba y no podía aflojar. Su equipo necesitaba ganar esta vez y recuperar su orgullo.
- Bien, speedy, pero necesitarás algo mas que eso para anotar.

Taylor mueve sus manos lentamente y luego empuja sus palmas como si quisiera empujar una pared.

- Mana Gris: Shield!

Una pared de mana celeste comienza a viajar a velocidad media en dirección al chico. Aprovechando el impulso de Noah.

Cuando vi la pared de mana avanzar hacia mi, rápidamente giré el cuerpo o al menos lo intenté, aunque con el impulso que llevaba me había resultado bastante difícil, había tenido que barrerme para frenar mi velocidad y apoyándome con el brazo libre me levanté usando la misma inercia que llevaba para seguir corriendo, después me lancé de un salto hacia al frente para tratar de salir de su alcance y casi estrellé mi boca contra el piso, de no ser porque usé la pelota como colchón...

“Como es que Hazel y Sebastyan disfrutaban hacer esto todos los días?- Digo, no estaba mal pero estrellarme contra todo no estaba siendo divertido.

-Si, pero tu necesitaras algo mas que eso para detenerme...- Le contesté desafiante y después de tomar aire volví a correr hacia la portería.

Taylor sonrie y se cruza de brazos mientras espera a que Noah se acerque un poco. Sin darse cuenta el niño se iba acercando a su trampa.
- Mana Gris: Shield... - murmura mientras alrededor de la porteria, un escudo plano se habia formado, tan tenue que no era tan facil de percibir - Vamos.. meteme gol si puedes...


~Trigger: Cuando Noah se acerque será catapultado lejos del campo.

“Toma eso! Maldito portier presumido” Pensé sacandole la lengua mientras aceleraba la velocidad en el ultimo tramo de la cancha, traté de alejarme lo mas que pude de Taylor, sin perder de vista la portería claro, anotaría un touchdown...

Y cuando estuve por anotar...

-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh- Grité otra vez mientras “algo” me mandaba a volar fuera del campo, atravesé todo el lugar de lado a lado y cuando salí de los limites, desaparecí en destellos y luces.

Al momento, abrí los ojos y solo miré al portier con un gesto bastante cansado y lleno de aburrimiento, eso no se iba quedar así, había estado cerca, volví a entrar a la cancha. Tenia que pensar en una nueva estrategia, no importaba cuanto quisiera darle su merecido a ese tipo, iba jugar limpio, era un carrier no un nuker...

“Vamos...Vamos... has visto muchos juegos...solo recuerda una de esas veces en que le hicieron una anotación a Taylor...si claro y la mayoría de esas veces anotaron cuando estaban jugando equipo contra equipo”

Apreté los dientes mientras entraba otra vez a la cancha y tomé el balón, comencé a caminar hacia la portería contraria todavía sin correr, tenia que analizar los movimientos de Taylor antes de actuar y también tenia que idear una forma de acortar la distancia que iba recorrer, 10 segundos era muy poco tiempo...

Taylor se ataca de risa al ver al niño volar. ¡Todos caian!
- AJJAJAJAJAJA Ves? Mejor regresa a Little Monsters, mocoso, porque necesitamos un Carrier de verdad!

Sinceramente no era muy fan de atacar a los niños, pero, entre romperle el corazón a un niño y que lo intente de nuevo no era lo mismo a gastar su penultima oportunidad para ganar el campeonato.
- Anda niño! Acabemos con esto...

Y ahora qué? Honestamente todavía no tenia ninguna estrategia en la cabeza, pero poco a poco empezaba a fabricar una, primero, tenia que medir algo y ese algo era peso del balón, lo dejé caer delante de mi y antes de que tocara el piso le di una fuerte patada para levantarlo, no había sido mi mejor patada, ni tampoco era un gran lanzador pero con ello, logré recorrer varios metros, la pelota de Mugby parecía estar hecha de metal, se sentía dura, me había dejado el pie algo adolorido pero extrañamente era muy ligera así que rápidamente corrí detrás de ella para alcanzarla y con dificultad la atrapé, había logrado una buena altura y una buena velocidad mejor de lo que esperaba...

Taylor podía pensar que solo estaba haciendo estupideces, lo único que veía era a un niño hacer malabares con una pelota y no estaba muy alejado de la realidad, se me estaba acabando el tiempo y de seguir así probablemente tendría que esperar 1 o 2 años mas antes de poder jugar en el equipo.

-Cállate, no me dejas pensar...- Le contesté algo fastidiado, odiaba perder...

Por lo pronto estaba casi listo, ahora tenia que preocuparme por Taylor así que seguí avanzando con la pelota bajo mi hombro y fui agarrando velocidad hasta que empecé a correr hacia la portería, ya estando cerca bajé un poco la velocidad y me mantuve a la expectativa, estaba esperando alguno de sus movimientos, algo que me indicara que ya se había preparado, donde estaba esa maldita barrera por qué no había podido verla?...

Taylor desayunaba ninios como Noah en el desayuno. Vio como el ninio ahora esperaba la barrera frente a el, dejandolo en un campo bastante abierto.

Sonrio un poco y suspiro, en verdad el ninio no sabia nada de Mugby, pero le habia sorprendido su terquedad. Tal vez en algunos anios podria lograrlo pero ahorita no era siquiera apto para ser un aguador. Movio su mano y una barrera aparecio tras de el, jalandolo con fuerza hacia otra barrera. Taylor da un aplauso y ambas barreras se mueven a gran vleocidad, aplastando al ninio.
- No es muy agradable verte morir... y no se si sepas, pero los cuerpos de Mugby gastan algo de tu mana para crearse... ya detente, no vamos a llegar a ningun lado. Podras entrar luego, cuando aprendas algo de magia de verdad.. por ahora mejor ve los partidos y aprende.. no pienso seguir matando a un ninio, es antiprofesional...

En verdad se sentia mal. No era de su agrado aprovecharse de un ninio, pero no sabia otra manera de vencer a esta clase de gente que era terca y obstinada. Tal vez no era lo que el esperaba, tal vez deberia dejarlo jugar... y luego? Si perdian por la inmadurez de un ninio de que? 10 anios? Y se les iba el campeonato tal vez nunca cumpliria el suenio de su hermana de comer cereal en la gran copa de Mugby... mucho menos ser aceptado en sexto para el equipo estrella de Furukawa...

Comenzaba a incomodarse...

Y ahí estaba otra vez el dolor, una vez más, abrí los ojos y di un paso atrás mientras largaba un profundo suspiro, todavía no terminaba de acostumbrarme a la sensación de “morir” y volver a la vida, tal vez Taylor tenia razón y aun no era el momento de unirme al equipo, prácticamente había intentado todo y no parecía haber forma de pasar, era imposible... era imposible que un Darkha pudiese pasar a un mago únicamente corriendo, la pelota te dejaba sin habilidades...

Solo me quedaban dos opciones, una era poner en marcha mi ultimo plan y la otra era jugar sucio, lo cual no era muy de mi agrado.

Una sonrisa cansada apareció en mi rostro... no era esa la forma en que me gustaría ganar pero parecía no haber otra opción, tal vez eso era a lo que quería orillarme. Una gota de sudor recorrió mi frente y descendió por mi mejilla hasta perderse, era un sudor frío y mi respiración empezaba a alterarse también, jugar Mugby no era solamente diversión como parecía y lo que iba hacer ahora, no era nada alentador...

-Todavía no he terminado...- Fue lo único que le respondí y volví a cerrar los ojos para entrar a la cancha.

Una vez ahí, me quedé quieto, solamente mirando al portier desde la distancia, tragué saliva y sentía como mis piernas se doblegaban, tenia miedo y mucho y creo que mi propio cuerpo estaba tratando de decirme que no lo hiciera, tomé un poco de aire y retrocedí otro tanto.

“Esto me va doler y mucho...” Pensé, afortunadamente no era yo en realidad, si no, ni loco me atrevería a hacer algo como eso. Lentamente me di la media vuelta, si no agotaba todas las posibilidades, pronto me sentiría culpable, le había prometido a mi hermano que este periodo iba verme jugar y se lo iba cumplir...

-Mana Azul: Arat Dieeeeeeeeeet!- Grité al momento en que aquella aura dorada cubría mi cuerpo y me hacia impulsarme a una velocidad sobrehumana hacia la pelota, solo fui dejando una estela de luz, era similar a lo que había hecho en mi primer intento pero esta vez, iba en serio, cuando alcancé la pelota, le solté una patada con todas mis fuerzas y solo escuché como algo ahí abajo tronaba por el choque contra el metal haciendo un ruido bastante estruendoso, todo mi pie quedó paralizado por el dolor y vi como en mi zapato aparecía una mancha rojiza de inmediato, pero no me detuve a pesar de que no podía parar de gritar continué volando tras el balón -GAAAAAAAAAAAAh!!!! AAAAAAAAAAAAAgh!!!! AAAAAhhhhhhhh!!!-

La pelota salio disparada formando una especie de parábola y yo, la seguí por los aires volando tan rápido como mi hechizo me lo permitía, dentro de mi cabeza, iba contando...

1...2...3...4...5...6...7...8...

Y justo en ese momento capturé el balón, abrazándome de la pelota y cambié la trayectoria, en esos últimos dos segundos, descendí usando mi super velocidad esperando que con eso y la fuerza que se iba generar el caer desde esa altura fuera suficiente para atravesar la barrera del Portier, estaba dispuesto a estrellarme con Taylor y a destruir su barrera con mi propio cuerpo si era necesario o literalmente, morir en el intento, al final solamente cerré mis ojos y abracé el balón con todas mis fuerzas mientras esperaba el impacto...

- Q..Que diablos?! - se pregunta Taylor al ver la sangre brotar del pie dle ninio - NO NECESITAS...

El corazon de Taylor comenzaba a latir con fuerza, hacia mucho que no estaba tan estresado y frustrado, pero a la vez, tan curioso de ver lo que haria el ninio. Que clase de monstruo tenia enfrente.

Al ver el vuelo, el Portier le recordo un aguila que se elevaba para luego caer en picada hacia su presa. Estaba atonito con las acciones del ninio, probablemente con algo de habilidad y mana extra hubiera podido hacer mil cosas.. pero era casi casi una jugada profesional. Los ojos del demonio se abren de sorpresa y al reaccionar mueve sus manos para lanzar una barrera en forma de hexagono en direccion al ninio.
- MUY IMPRESIONANTE PERO TU HISTORIA ACABA AQUI!! - grita Taylor emocionado, pero encubriendolo con imponencia y un aire de superioridad. - Acepta la verdad y muere de nuevo!!!!

La barrera sale disparada a gran velocidad, sin embargo, la gravedad estaba de su lado y esta se rompe cual fragil vidrio. Taylor no tiene oportunidad de reaccionar y ve como el ninio lo golpea de lleno, matandolo del shock y cayendo ambos en el touchdown...

Habia anotado....
/ / / / / / / /

El Portier vuelve a la vida y se queda viendo el campo con un rostro lleno de seriedad y molestia. Esperaba que el ninio apareciera una vez mas en el campo, dandole la espalda.
- Mocoso... - murmura el Portier sin voltear a verlo - Eso que hiciste fue la idiotez mas grande que he visto en mi vida...

...
Bienvenido al equipo de Sal, Carrier Fenian...

Taylor desaparece y su cuerpo se endereza, observandole y sonriendole maliciosamente.
- Mas te vale que entrenes.. tu infierno comienza aqui... jejeje...

Yo estaba atónito y al mismo tiempo, una inmensa felicidad me había invadido de repente, recuerdo haber sentido el impacto contra la barrera, pero fuera de eso, no recordaba nada más, creo que el dolor me había bloqueado o simplemente, había “muerto” instantáneamente, quien sabe pero fuera cual fuera el caso lo importante era que había cumplido mi parte del trato, había anotado, todavía no escuchaba las palabras de Taylor y ya tenia una sonrisa boba pintada en el rostro que no podía hacer desaparecer.

Tan pronto aparecí en la cancha giré el cuerpo para verlo aun cuando este hubiese quedado dándome la espalda y apenas iba acercarme cuando lo vi desaparecer, así que inmediatamente después volví al mundo “real” y corrí hacia quien seria mi nuevo capitán, ya una vez ahí, noté que estaba exhausto, de hecho sentía que me faltaba un poco el aire, me paré frente a él, estaba muy emocionado y no podía contenerme, si bien, había sentido una fuerte rivalidad al principio, todo había sido parte de la presión por haber puesto mi posición en juego, nada personal...

-GRACIAAAAAAAAAAAAAS!!!- Le grité con mucha fuerza y hasta le di un abrazo teniendo que saltar para alcanzarlo, para tener la peor reputación de todas las estrellas de Mugby, no parecía ser tan malo.

-Te dije que anotaría, prometo que entrenaré duro...- Le dije y no lo solté, nunca fui muy fan de otro equipo que no fuera Srad por obvias razones claro, pero ahora, obligadamente tenia que serlo, ahora era miembro del equipo de Sal y tenia que estar orgulloso de eso...

No podía esperar que fuera fin de semana o algo para ir a contarle a mi hermanito como me había ganado el puesto, tal vez debería escapar esta noche o algo por el estilo...

-Oye oye OYE OYE!! - dijo Taylor histerico al ver que se le echaba encima el ninio. Inmediatamente hizo lo posible por zafarse del ninio y alejarse un poco. No esperaba realmente que se le avalanzara pero pues tal vez era normal... todos los ninios era asi.

El demonio desvia la mirada al escuchar la emocion del ninio y solo resopla.
- Como sea, deberias irte a descansar un rato. Lo mas seguro es que te duela un poco.. o mucho el cuerpo.. pero estaras bien. Creo que ya no nos veremos hasta maniana, asi que vete con cuidado y nos estamos viendo...

Dicho esto, Taylor se da la media vuelta y va por sus cosas. Habia sido un entrenamiento favorable donde habia hecho una gran apuesta. Dar todo su dinero a que el ninio seria un buen Carrier... y que este anio, tendrian el campeonato...