Una Habitación Limpia

Si de algo podria estar orgulloso es de lo limpio de mi habitación. Cada día hacía lo posible por administrar al menos 30 minutos de mi día para limpiar. Ya sea acomodar mi ropa, barrer o hasta limpiar la pequeña estufa. En los diferentes cuartos donde he deambulado he visto que nadie las usa, normalmente piden cosas de la cafetería o así. En mi caso y teniendo ahora asignaturas de cocina era normal mantenerla limpia después de uso.

Esta vez no era la excepcion. Noah había decidido aprovechar algunos dias antes del inicio de clases para convivir con Hazel y demás y dijo que luego vendría a quedarse conmigo lo cual me ponia muy feliz. Gracias a la falta de mareos y a que hemos estado muy unidos desde ese primer beso... se me hacia algo muy bonito. Ibamos a dormir juntos como en Little Monsters, solo que no estaría Aris enmedio...

Preparé un postre de pudin de fudge con dos diferentes tipos de chocolate y decidí tomar un baño. Noah estaría pronto ahi y posiblemente sea una noche divertida...

Había estado saltando de habitación en habitación durante estas vacaciones y no hace mucho que me había dado una vuelta por mi dormitorio para dejar mis cosas y por supuesto para saludar a Taylor, lo había visto de todas formas durante el tiempo que me quedé en el ranchito pero el sentimiento era un poco diferente, Little Monster siempre había sido mi casa pero ahora tenía sentimientos mezclados poco a poco me había vuelto parte del Instituto y no sé, a pesar de haber dejado a mi hermanito, al mismo tiempo, me sentía bien por haber regresado, pronto empezarían las clases y vería de nuevo a mis amigos y compañeros…

A pesar de que hacía mucho frio seguía siendo orgullosamente alemán y haber vivido 8 años ahí, me habían hecho tolerante a los climas fríos, así que, a pesar de las bajas temperaturas, ese día traía puestos unos shorts y unas largas calcetas, una bufanda color celeste, unas orejeras todas afelpadas y el saco del uniforme de invierno, si, bueno, no tenía tanta ropa.

Otra de las costumbres que se me habían pegado era la de hacer ejercicio por las mañanas o las tardes, los entrenamientos con Sloan eran pesados y cada vez iban aumentando la dificultad, tenía que acondicionarme de nuevo o la próxima sesión iba morir en el patio de la escuela, además estaba el Mugby y la temporada no tardaba en empezar…

Llegué corriendo y toque la puerta un par de veces.

-Socrates!!- Le grité un par de veces pero nadie me contestó, al revisar si la habitación se encontraba abierta, me di cuenta que sí y entré. Todo estaba extrañamente limpio, digo, no es que grillo no limpiara su cuarto pero… estaba impecable, casi llegué a pensar que lo habían movido a otro cuarto.

-¿Estás?- Pregunté alzando la voz y después de dar un par de vueltas, alcancé a escuchar el sonido de la regadera y caminé hacia la puerta del baño.

-Hey! Ya llegué- Le grité al niño desde el otro lado. Sentí como el corazoncito empezó a latirme, recordaba la última vez que compartimos la ducha y empecé a divagar más de lo que debía, creo que la cara se me puso un poco roja de solo recordar. Afortunadamente el olor a chocolate me distrajo lo suficiente como para alejarme de eso y caminé hacia la fuente de ese aroma, encontré el fudge de chocolate y piqué con el dedito para probarlo.

Escuchar la voz de Noah me hizo ondear mi colita. A veces pensaba que tener un miembro extra que los humanos era mas un impedimento que una ayuda ya que seamos sinceros... ¿De que me sirve tener cola? No es muy resistente ni tampoco se puede luchar con ella y menos hacer cosas... muy apenas se como verla un poco...

Al acabar de bañarme tomé la toalla y sali puesto que no había llevado ropa. Como no era necesario usar el uniforme no tenia porque mover la ropa que guardo en el baño, el uniforme puede mancharse o algo y queria ir completamente limpio el primer día.
- Hey! Sirvete en un platito ya sabes donde estan! - dije señalandolo, sin darme cuenta, comenzaba a ruborizarme un poco - Ehm.. ire a cambiarme...

Podrian pasar años luz y creo que siempre me apenaria que Noah me viera asi...

-Uhm…si- Le respondí, realmente ni siquiera le estaba siguiendo el hilo de la conversación, me preguntaba si eso era normal o tal vez era de esos niños “precoces”, en mi defensa, no siempre estaba pensando en eso, como Taylor por ejemplo pero cuando pasaban cosas como estas, me era muy difícil ignorarlas.

Era momento de tomar decisiones, me quedé paradito viéndolo desde la cocina hasta que reaccioné y serví un poco de postre en dos platitos. Alcancé a escucharlo abriendo los cajones y sacando su ropa, así que me apuré para alcanzarlo.

Digo, llevaba poco más de un mes de ser su novio, no debería preocuparme verlo desnudo o ¿sí?, tenía que empezar a portarme más como su pareja… ¿cierto?
-¿Y qué tal?- Pregunté alcanzándolo por detrás y deteniéndome detrás de él, me tardé todavía un ratito en reaccionar, estaba pensándolo mucho…–Hey! ¿No me vas a saludar?- Pregunté en un tono juguetón para luego dejar un platito en la cama y tomarlo por los hombros.

Lo vi a los ojos, no estaba seguro si podía escuchar mi respiración pero luego de eso, le sonreí y lo besé, lo abracé fuerte y luego me separé de el para ahora si darle su…espacio o…algo. Me senté en la cama y empecé a comerme el chocolate, de repente, levantando la mirada para verlo…

La reacción de Noah me había sorprendido. Aun cuando el menor hubiera sido el que diera los primeros pasos SIEMPRE esta vez se había comportado diferente. Ya habia pasado la etapa donde ninguno de los dos sabia dar un beso, pero era probablemente la primera vez que se aventaba a jugar con eso. Al sentir el besito senti como mi corazon se aceleraba pero intenté contenerme.. me estaba haciendo un poquito fuerte en ese aspecto.
- G-gracias.. - dije tomando el fudge y viendolo por un momento. Sin pensarlo dejé el platito sobre el buró y camine hacia él y sin pensarlo me le senté encima y le di un beso.

Aunque el niño era fuerte logré recostarlo, movi su platito lejos de nosotros y le di besitos en la cara mientras acariciaba su cabeza con la mano.
- A-Asi esta bien??

No intenté detenerlo pero no esperaba que “Grillo” fuese a reaccionar de esa manera, la mayoría del tiempo, intentaba no incomodarlo pero esta vez él era quien me estaba siguiendo el juego, me puse muy incómodo al sentirlo encima, solo estaba en toalla! Y no pasó mucho tiempo antes de que algo empezara a empujarlo…

Se me puso la cara completamente roja y tenía que respirar por la boca para no ahogarme.

-Te va dar frio…- Le dije mirándolo desde abajo después de todo, seguíamos en invierno y no estaba seguro si el demonio estaba acostumbrado a estas temperaturas. Levanté una manita para tocar su pecho y lo acaricié tiernamente bajando hasta su cintura, siempre deteniéndome cuando sentía su toalla.
-Si…- Le respondí. –Quería pasar tiempo contigo…uhm… solos…-

El olor del niño comenzaba a hacerme estragos en las hormonas, pero al empujarme con "eso" senti mucho miedo y comencé a sentir las alertas. Sabía que era porque el mismo Noah no estaba listo para experimentar estas cosas pero de todas maneras el miedo estaba presente. Intenté no dejar que ese sentimiento me inhundara y me levanté un poco apenado.
- Si.. yo tambien..- le dije tomando mi ropa - dame un segundo.. me voy a vestir.

Me fui casi corriendo al baño, tenia que calmarme. Me sentia bastante tonto por ese "movimiento" pero pues, tal vez era lo que Noah queria pero parece que no estaba listo para ese gran salto. Suspiré y me vestí de inmediato para salir nuevamente y tomar mi platito de fudge.
- Ya... ahm... quieres ver algo??

Asentí con la cabeza rápidamente, realmente no quería que se levantara pero lo deje ir y me quedé pensativo, supongo que Socrates todavía no estaba listo, tal vez, ni yo lo estaba pero las cosas seguían subiendo de todo cada vez más y más…

Me quedé recostado por otro ratito, seguía un poco incómodo aunque lo rojo de la cara ya se había ido, me acomodé el shortcito con una mano aprovechando que el demonio se había ido a cambiarse e intente dejar atrás lo que había pasado.
Cuando regresó ya estaba un poco más tranquilo, estaba acostado boca abajo en la cama, ya me había quitado los zapatos y ahora solo estaba comiendo del postre que había preparado.

-Uhm… por cierto, te quedó muy rico.- Le dije y luego me le quedé viendo cuestionándolo con la mirada.

-¿Qué cosa?-

Sin decirle mas me senté a su lado y puse el plato de pudin frente a él. Me relajé y luego observé el plato nuevamente intentando concentrarme. Acerqué mi dedo lentamente al momento que tocaba el pudin este comenzó a moverse y a agarrar la forma de una esfera. Movi mi dedo y la esfera comenzó a flotar lentamente siguiendo mi dedo, para luego volver a caer en en plato con su forma comun.
- Viste?? Aprendi a usar Mana amarillo! - le dije muy alegre - Tengo todas las vacaciones intentando y parece que ya casi lo logro!! ¿Que te parece?

Me sentia muy feliz y muy orgulloso aunque solo fuera mover pudin. Realmente la magia era bastante sencilla cuando podias sentirla y los hechizos poco a poco parecian ir entrando en mi cabeza.
- Te gusta? Lo hice para ti... para .. que veas que no soy tan inutil...

Me sacó una sonrisa ver como levantaba el chocolate y lo convertía en una esferita pero no dije nada para no desconcentrarlo. Me le acerqué casi como un perrito o un gato y me acomodé a su lado apoyando la cabeza contra su pierna.

-Te dije que si podías!- Le respondí animado y me quite las orejeras para lanzarlas por ahí al piso, luego fueron los zapatos. Ups! Yo no era tan limpio y ordenado como él…

Luego se me ocurrió otra cosa y me reí bajito. –Depende- Le contesté jugando y me apoyé sobre uno de mis codos mientras que con la otra mano le acercaba el pudin que me estaba comiendo.

-AAAAAAAAHM- Exclamé abriendo la boquita. ¿Tenía que practicar o no? –No me vayas a manchar!-

Eso... no...

Las manitas me comenzaron a temblar al ver la boquita del niño abierta y decidi concentrarme.. o al menos fingia hacerlo. Toque de nuevo el pudin pero sin avisarle se lanzo en dirección a Noah embarrandosele todo en la cara.
- ...!!!! - no supe que decir, me quedé paralizado al ver la reaccion del chocolate... ¿En que me equivoque?

Me asuste y comencé a tartamudear mientras mi rostro se ponia azul.
- Noah! Noah! Estas bien!? Perdooon!!

Tenía los ojitos cerrados mientras Grillo hacia su hechizo, no es que desconfiara de él…bueno, tal vez un poco pero de cierta manera, lo hacía por mi propia “seguridad”. Cuando sentí el chocolate embarrándoseme en toda la cara, no me molesté, en realidad me pareció divertido a pesar de que mi ropa tampoco se había escapado del daño colateral. Hmmm… bueno, al menos el saco era negro, con suerte nadie lo notaria en la escuela.

-Wow, no lo embarraste más porque ya no quedó chocolate.- Le dije molestándolo aunque por la sonrisa que tenía era obvio que se trataba de una broma. Además, después de que Aris me hiciera explotar unas palomitas o me hiciera bromas con los nuevos hechizos que estaba aprendiendo creo que estar embarrado de chocolate era 1000 veces mejor.

Me empecé a quitar el chocolate de la cara con una manita y luego me puse a lamerlo como gato mientras veía las reacciones de Socrates, me daba ternura verlo tan estresado así que lo abracé con la otra manita que tenía libre y lo jalé hacia mí.

-Estoy bien.- Le aseguré. –Pero tienes que seguir practicando y nunca lo hagas con cuchillos, ni nada parecido-

Aunque seguia ruborizado una venita apareció en mi cabeza. Esa condescendencia para conmigo me pegaba en el espiritu. Si algo podía NO discutir era que Noah tenia mejor conocimiento del mana que yo. Para el era como respirar y para mi era como mi vida siempre: tener asma.

Lo observé de cerca cuando dijo lo de los cuchillos y sonrei aun con los ojos enojados y el rubor. No dudé un poco y le mordi la nariz un poco fuerte pero no suficiente para lastimarlo en señal de enojo. ¡Obvio que no iba a usar cuchillos si el peligroso era él no yo!
- Perdon, pensé que eras un pastel parlante - dije viendolo maliciosamente. - Esta bien, maestro, la próxima vez no me hagas esa clase de pruebas de concentración....

-¡Owww¡ ¡Ouch!- Exclamé y empecé a manotear histéricamente cuando sentí la mordida en mi nariz, lo empujé lejos de mí y lo vi feo.

-¡Hey! ¡No me muerdas¡ ¿Qué te pasa?- Le grité frunciendo las cejillas, no estaba seguro si se había ofendido por lo que dije pero ¡era solo una broma! no entendía su frustración. Me sobé la nariz, todavía manteniendo el mismo gesto fastidiado y luego le salté encima tratando de tirarlo sobre la cama.

Socrates no era muy fuerte aunque yo tampoco era muy pesado, cuando era más pequeño a veces jugaba luchitas con mi hermano, bueno, también con el capitán de Srad pero con él no era tan divertido…considerando que nunca tenia oportunidad…

-¡Toma!- Le dije al semi-demonio soltándole gruñidos al hacer fuerza para empujarlo. No solía jugar de esa manera con Grillo pero poco a poco me iba pareciendo menos frágil y más como el resto de los niños, sin ofender...

-Oye, ¿Quieres que te enseñe a hacer Nebulize? No es tan…bueno, creo que ya podrías practicarlo.-

Si, si, era mejor evitar esas cosas como fácil o difícil, no quería que me arrancara la nariz…

Cuando el niño se aventó como tigre de peluche sobre mi me asusté nuevamente. No esperaba que de pronto fuera tan pasional toda esta batalla pero el mismo se detuvo aunque seguia encima de mi. La respiración se me agitaba y mas por ver aun manchitas de chocolate en el rostro del niño
-Eh? - reaccioné ante la propuesta y negué inmediatamente - No.. creo que me gusta que tu lo hagas...

Quité un pedazo de chocolate de mi camiseta recien lavada y suspire y luego lo voltee a ver.
- No sabes algun hechizo para lavar la ropa? me estas embarrando de chocolate. A diferencia *sniff sniff* tuya yo ya me bañé.

Fue entonces cuando el olor del niño estaba muy cerca y comencé a moverme como gusano en brazas para salirme de ahi....

Me quedé sentado encima de él mirándolo con una sonrisa maliciosa, pensé en hacerle cosquillas pero intenté ponerle atención al a conversación que intentábamos tener.

Luego quise decirle que no, que debería aprenderlo el mismo como habíamos acordado no porque me molestara hacerlo pero… ¿qué iba pasar cuando no estuviera? Y por cierto, era un poco incómodo estando frente a todo el grupo pero si bien la mayoría no sabía que pues… éramos pareja, más de alguno ya nos molestaba con eso, ya saben cómo son todos y eso de que nos la pasáramos juntos, todo el día, todos los días tampoco ayudaba…

-¡Tú me embarraste primero! Y era mi uniforme- Le dije inflando las mejillas y poniéndome rojo cuando lo escuché olfatearme. Me bajé de inmediato y le di la espalda mientras me quedaba acostado en la cama, manchándosela también, se lo merecía…

-Ya voy…- Le dije solo para después levantarme y alejarme unos pasos de la cama, ya estaba descalzo y con el saco medio abierto. Había algo más que quería preguntarle antes de irme pero esperé a que se me bajara un poco la vergüenza para poder hablar con él.

-Salí a correr, ya casi empieza la temporada y pues aha…- Agregué justificándome y una vez más saliéndome del tema. Me di cuenta de eso y volví a cambiar totalmente el tema, una vez más.

-¿Te da miedo?- Pregunté de repente viéndolo desde donde estaba, luego me quedé en silencio, fue un largo silencio hasta que volví a tomar la palabra.
-Los ataques y eso…-

Lo ultimo me había sacado TANTO de onda que solo me le quedé viendo. Estaba a punto de preguntar "perdon?" pero el mismo continuó la oración. Ciertamente en mi cabeza no estaba pensando eso pero ¿Que diablos con esos cambios de tema? Este día Noah parecia estar tratando de sacarme un infarto.
- Ah.. - dije para aclarar - Pues.. sí, un poco.. pero pues... mas que nada me preocupa que intenten hacerte daño a ti o a tu hermano. Pero pues, Furukawa es como un hogar, de hecho, no recuerdo cuando fue la ultima vez que me senti tan bien estando en un lugar. Lo ultimo que he sentido es soledad y ha sido gracias a ti, gracias a la gente de creag.. al capitán Korhonen y así... Por eso mi preocupación y miedo no me afectan tanto porque es mas mi deseo de proteger este lugar... y a ti... a quien.. pues...

Desvié la mirada y me sonrojé totalmente. Lo bueno es que ya estabamos "acostumbrados".
- A quien amo....

Sonreí, era triste no poder contarle toda la verdad ni siquiera a él pero en el fondo me sentía tranquilo, estaba convencido de estar haciendo lo correcto, Socrates podía estar en paz y creo que ninguna persona en el mundo dudaría en hacer las cosas que yo he hecho por la persona que amas.

-Yo también…- Le dije sonrojándome y seguí sonriéndole. –Bueno, me voy a bañar. Porque alguien me dijo que apesto…- Le dije al niño de Creag con un poco de sarcasmo y luego gruñéndole mientras me daba la media vuelta y caminaba hasta el baño. Hacía mucho frio aunque vestido como estaba no lo resentía tanto, sin embargo, tan pronto empecé a desvestirme sentí que me congelaba. Toda la ropa quedó regada en el piso, entre muchas de mis malas costumbres, estaba no ser organizado situación que se había agravado cuando empecé a tener más confianza con el semi-demonio.

Abrí la llave y puse el agua caliente a todo lo que daba mientras luchaba por dejar de temblar. Ya después de un rato con el vapor y demás, el baño se sintió más calientito. En realidad ahora era más parecido a un sauna, el Instituto tenía la ventaja de poder ajustar la temperatura con Mana entre otras cosas, casi todo estaba hecho de forma tradicional pero con ligeros ajustes para los seres mágicos.
Digo, había creaturas como los djinn que necesitaban otro tipo de cuidados. En nuestro caso, magos como yo, podían usar estos beneficios para su comodidad y no había ningún problema con ello.

Volví ajustar la temperatura a algo que no me derritiera y finalmente entré a la regadera, me quedé un ratito recostado, dejando que el agua cayera sobre mí y empecé por limpiarme el chocolate que traía en la cara, luego cuando tuve que tallar mi espalda, saqué otro “Noah” para que me ayudara con eso pero… bueno, ya saben que concentrarme era algo que no se me daba, a veces ni cuando me estaba bañando.

-Toma!- Le grité al “Noah” falso y apreté el champú para tirarle un chorrito en la cara. Obviamente el clon falso no iba reaccionar pero podía hacer que lo hiciera!
-Oye!- Dijo la copia y luego se me echó encima e intentó tirarme y ahí fue cuando todo se fue al demonio. Empezamos a forcejear y a salpicar agua por todos lados, se escuchaban gritos, pataleos y mucho ruido, probablemente Socrates me iba matar cuando se enterara y no quería sonar como un “douche” pero esa era una de las cosas que menos me importaban en este momento. El falso yo me estaba pateando el trasero.

¿Cómo es que una copia era tan fuerte? Eso no se puede! No pasó mucho tiempo antes de que el clon falso me tuviera contra el piso agarrado de los brazos pero era muy pronto para rendirse...

-Grrr… Agh! Bájate!-

"Si supieras como me vuelve loco tu olor" pensé al ver al niño caminar lejos de mi. Cuando la paz llegó simplemente cerré los ojos para relajarme con el olor a chocolate y niño que habia tenido pero solo duró poco. Empecé a escuchar ruidos y chapoteos dentro de la regadera y lagrimas comenzaron a salir de mis ojos.
- Alla van mis dos horas limpiando el baño.. T_T - dije mientras podia ver aguita comenzar a salir bajo la puerta. Como siempre parecia que en vez de tener novio habia tenido un hijo.

Aunque probablemente tener labor de parto seria mas amigable que cuidar a Noah Fenian, pensé como era que Noah siempre encontraba algo en que distraerse. No pensé dos veces en seguir el consejo de Isaac de conseguirle Ritalin pero si se la daba muy probablemente creeria que le estoy diciendo loco o enfermo.
- Y si se lo pongo a la comida?? .. No no.. eso es cruel Socrates.. - dije a mi mismo cerrando los ojos nuevamente. Intentando evadir los ruidos del niño...

-Bájate!- Le dije a la copia de mana rojo, claro que si realmente lo hubiera querido, el Noah falso me habría obedecido pero era para darle un poco más de realismo al juego, seguí forcejeando y haciendo toda clase de ruidos pero me tenía bien agarrado, no me explicaba como la copia podía ser tan fuerte, era más fuerte que yo…

-Te lo advierto!- Le volví a repetir y fue en ese momento pegué mis manos con las suyas, sonreí malicioso y mis palmas empezaron a brillar de un color azulado, se escuchó también un fuerte zumbido como de avispas y después un horrendo CRACK! Como si hubiese caído un relámpago dentro del baño de Socrates.

Todo el piso se empezó a electrificar parecían pequeños estallidos y no es que fuera una eminencia del mana negro pero había agua por todos lados, los pequeños rayitos y hasta las chipas empezaron a salir por debajo de la puerta y fue en ese momento que me di cuenta que….

–GAAAAAAH!!! OOOWWWWWWW!!! OOOOOUCH!- Dije pegando de gritos mientras me revolcaba en el suelo. Ok, eso no me lo esperaba, quedé con todo el pelo esponjado y soltando humito que ni siquiera se notaba por todo el vapor que había en el cuarto.

Mi yo falso dio un salto por la descarga y cayó a mi lado retorciéndose de la misma manera. Se alcanzaban a escuchar nuestros gritos y quejidos pero poco a poco se fueron convirtiendo en risillas…

Aproveché que mi copia estaba tan jodido como yo y le salté por la espalda casi como de caballito, lo atrapé del cuello con las dos manitas y empezamos a forcejear…de nuevo…

-Voy a ganar…te-

Todo se escuchaba normal hasta que el ruido se volvió violento y senti mana negro en el ambiente. ¿Que estaba haciendo ese niño?

Me levanté inmediatamente y grite "abrete!" al momento que la puerta me obedecía y esta se abria para ver todo lleno de humito y algunas cosas rotas, sin contar al niño con los pelos esponjosos encima de él mismo.
- ES REAL NOAH FENIAN MIRA COMO DEJASTE MI BAÑO!! - le grite histerico al verlo todo quemadillo - Solo te ibas a bañar no ibas a causar un alboroto y usando hechizos negros!!! MIRA MI UNIFORMEEEE

Sin decir mas fui y le di palmadas a mis uniformes que estaban a punto de envolverse en llamas. Bufé mientras tosia un poco por el humo y comenzaba a respirar mas fuerte.
- Ugh! Es el colmo contigo!

Irónicamente, a pesar de que estar castigado era mi estado natural, aun no me acostumbraba a que Socrates realmente se enojara conmigo. No supe cómo reaccionar, solté de inmediato al otro yo y todavía sentadillo me le quedé viendo fijamente…

Grillo a veces me regañaba pero esta vez sentía que realmente se había enojado conmigo, así que no supe que hacer…

Y NO es que estuviera tratando de manipularlo haciendo cara de perrito pero esa era justamente la cara que tenía en este momento, le hice un puchero y solo miré el piso mojado mientras lo escuchaba. El yo falso ya había desparecido…
-Solo estaba jugando…- Le dije tímidamente tan bajito que tal vez solo yo mismo me había escuchado, una mala costumbre que tenía era a siempre intentar “justificar” mis acciones aunque por experiencia sabía que eso no funcionaba con la mayoría de la gente…

-Perdón…-

Ahora me sentia mal bicho. Cuando lo escuché murmurar y hacer esa cara me senti mal por enojarme. Suspiré y lo levanté del piso y le di un abrazo.
- Perdon, no quise enojarme...es solo que... a mi me gusta tener mi baño limpio y... tarde dos horas limpiandolo... mira...

Le enseñé las manos un poco lastimadas por los quimicos del baño. En verdad ya me habia acostumbrado pero probablemente le ayudaria a entender un poquito mi frustración.
- Ya se que a ti no te importan esas cosas... - dije bajando la mirada - pero me ... me gustaria que lo tomaras poquito en cuenta...

Me angustié mucho en ese momento y sentí como el aire me faltaba nuevamente. Ese dolor en mi pecho y esas ganas de llorar. Me di la vuelta y caminé fuera despacito para dejarlo en paz. Tal vez habia arruinado el ultimo dia de vacaciones por una tonteria. Ahora que lo veia realmente me importaba mas el que el baño.
- Bueno... aqui ando... - dije cabisbajo.

A pesar de que reaccionó mejor de lo que esperaba no me sentía muy bien con ello, no después de haberle arruinado el baño y verlo marcharse de esa manera pero a veces no podía controlar los impulsos que tenía y muchos de esos impulsos eran bastante destructivos.

-Te…vas…a…mojar…- Le dije despacito mientras lo dejaba abrazarme, le recargué la cabeza en el cuello y me quedé calladito. Para cuando se separó, pensé en dejarlo marcharse pero me sentía culpable… no quería dejar las cosas así…

Le salté encima por la espalda y le di otro abrazo fuerte.

-Yo limpiaré…- Le dije bajito para finalmente soltarlo, pensé en decirle que se quedara, para que viera que realmente iba limpiar su baño pero no quería incomodarlo tampoco. Apareció otra vez el Noah de Mana Rojo y mientras yo regresaba a la ducha, el clon se quedó recogiendo todo lo que habíamos tirado con los hechizos, más de una vez estuvo a punto de caerse de una forma muy graciosa, algo malo de las cosas hechas con Mana Rojo es que podían seguir instrucciones simples, sí, pero si no las estabas controlando era un poco torpes...
-¿Dónde hay un trapeador?- Preguntó mi yo falso a grillo. Yo de repente me asomaba por detrás de la cortina para poder seguirle dando instrucciones. A veces ayudando a levantar una que otra cosa con Mana Naranja, irónicamente, me daba más vergüenza estar limpiando por la travesura que había hecho que estar desnudo…

No pasó mucho tiempo antes de que terminara de bañarme, digo, solo tenía que quitarme lo quemado y estaba listo, afortunadamente conocer muchos hechizos diferentes hacían que las tareas simples dejaran de ser tan aburridas.
Ahora que lo pensaba, ni siquiera tenía que usar el trapeador.

-Mira esto!- Le dije a Grillo asomándome otra vez y saliendo de la regadera sin tolla. Dejando aún más charcos de lo que ya había…

-FUS DIIN!- Exclamé fuerte, tan fuerte que ni siquiera parecía que hubiese sido mi voz, se escuchó un potente eco en el baño y de mi boca salió un aliento helado que empezó a congelar los charquitos de agua…
Entré en pánico y la cara se me puso completamente roja. Miré a Socrates un poco confundido y después a mi yo falso que me veía con la misma expresión que haría cualquier persona que hubiese entendido lo que paso.

“Eres un idiota”

-Cállate tú!- Le dije al clon falso quien simplemente desapareció.

-Uhm………eso no era  <<- Le dije a grillo tratando de no verlo mucho mientras quitaba mi cara de puchero pero era hora de intentarlo de nuevo! Me tomé un momento para pensar que es lo que había hecho mal y creo saber cuál fue el problema…

-FUS GRON OKAAZ!- Volví a gritar y esta vez en el centro del baño se formó un remolino pero no era de viento, sino de mana, no se sentía una fuerza de atracción, de hecho, los estantes e incluso las toallas ni siquiera se estaban moviendo pero todas las gotas de agua, incluso las de mi cuerpo empezaron a suspenderse en el aire y a pegársele. Se veían las gotitas de agua “arrancarse” de mi cabello y del resto de mi cuerpo.

Fue en ese momento que me di la vuelta para sonreírle a grillo, luego regresé la mirada al vórtice extraño que se había formado y luego moví las dos manitas desde donde estaba parado, dos enormes guantes blancos aparecieron aunque no eran otra cosa más que mana naranja y tomaron el vórtice para moverlo hasta la tina.

Ahí lo solté y ahora sí!, el baño se veía mucho mejor…

Desde que vi el Noah 2 no entendía por que todo tenia que hacerlo con magia. Había hecho mas mugrero con ella que sin ella. Suspiré al ver el piso helado pero intenté no moverme para no caerme. Lo ultimo que quería era fracturarme un brazo el primer día.

Cuando sucedió lo del vortice me quedé viendo. No entendía por que Noah tenia que gritar las cosas y menos comprendía como le hacia para que se escuchara tan diferente su voz. Observó al niño desnudo jugar con mana y haciendo las cosas mejor. Al menos me sentia feliz de saber que le importaba lo que sentia... eso me hacia sentir especial.

Sonreí y camine hasta él para darle un besito en la mejilla y abrazarlo de la cintura y recargarme en su hombro. Me quedé ahi un ratito y luego le pase una toalla para que se secara.
- Te espero en la cama, de acuerdo? - dije sin pensar que había parafraseado mal esa oración...