El nuevo defender

La muerte de Gustav dejó vacíos irremplazables en los corazones de muchos. A veces esa imagen de chico rubio tonto y amigable faltaba para aligerar las cosas para pocos. A veces la calidez de un abrazo y la admiración y respeto mutuo, era cosa que no podría reemplazar en una sola persona: en Korven.

Estaba harto, fastidiado, parecía que era él el único que de verdad estaba sufriendo la muerte de Gustav. Seguro le dolía a Hazel igual, pero Hazel lo mató, así que no solo hay pérdida, sino culpa. Y sí, a los ojos de Korven, Hazel tiene la culpa, debería admitir su responsabilidad y pagar por su acto, por más "heróico" que hubiera sido.

Había un espacio que Gustav dejó, y que de una manera u otra, tenía que ser llenado. El puesto de Defender de Srad. El mismo puesto que Korven alguna vez le cedió a Gustav alguna vez, pero tuvo que dejarlo en cuarto año por el crecimiento de sus cuernos, lo cual ponía en peligro la integridad física de los oponentes e inclusive la suya misma si no se andaba con cuidado, así que decidió dejar de jugar. Nunca le importó mucho el mugby como una meta en la vida, para él esa solo un juego, ni siquiera un pasatiempo.

No podía sentir rabia por ello, la vida continúa de alguna manera, pero se le hace que para muchos el luto ha sido muy corto.

Haberle dejado la posición a Gustav fue difícil, puesto que sus poderes no eran tan compatibles pero el estilo propio de Gustav con los ánimos y enseñanzas de Korven, hicieron de él un gran defender. Ahora había un nuevo chico por entrenar, alguien a quien Gustav debió haberle cedido el puesto, pero ahora era Korven el que lo haría por segunda vez. A él le hubiera gustado retomar el puesto de defender por esta última temporada, ahora que no tenía cuernos, pero no le era permitido. Alguien más debía llevar la tarea.

Korven se pone a buscar al entrenador Victor. Seguramenre él le dirá quién es el próximo defender: Lucas, a quien a su visión le falta mucha disciplina, o Raynor, por el cual sentía cierta simpatía por ser noruego y manejar ataques de hielo, por lo que sería más fácil trabajar con él, pero esa es decisión de los chicos y del entrenador.

El entrenador se encontraba en un pequeño cuarto arriba de los vestidores del estdio de Mugby, su llamada "oficina" donde coordibana la mayoria de las actividades deportivas del colegio desde su llegada, pocas eran las veces que iba con los demas maestros, al menos al principio, ya que para estos momentos de luto, el estaba mas en compañia de ellos, para saber un poco mas de que podia hacer para ayudar a la causa. Team work.

Recibio el llamado de Korven, un alumno de Sexto año que fue defender anterior a Gustav. Ofreciendo ayuda para entrenar a los jovenes. -Debe ser broma, pero bueno, veamos que quiere hablar.- Con esta idea en su cabeza, el nahual le dijo que fuese a su oficina para hablar mejor del tema.

Sobre la mesa tenia algunas carpetas donde tenia anotaciones acerca del equipo de Srad, tanto titulares como suplentes, con sus propias anotaciones, y puntos que trabajar en cada uno. Dejo ambas carpetas sobre la mesa y espero a que el chico venado llegara. -Mas le vale ser puntual- Dijo Victor mientras comia un gran sandwich de 3 carnes, viendo un partido de Mugby amistoso entre Mexico y E.U (Iban en empate : D )

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-Los escandinavos nunca llegamos tarde, y más vale que eso que comes no sea reno.- dice Korven en tono fuerte al pasar por la puerta sigilosamente mientras el entrenador observaba un partido.

Korven parece ser que había llegado más temprano de lo usual... era o llegar antes o quedarse a darle vueltas al asunto de Gustav y probablemente se hubiera arrepentido de hablar con el entrenador.

-Me llamo Korven Pålsson y soy el antiguo defender titular del equipo. Mi futuro en el mugby era prometedor, pero al crecerme las astas tuve que renunciar a él. Ayude a entrenar a Gustav y ahora que él no está aquí, ese hueco debe ser llenado de alguna manera. Dime, ¿has decidido a quién vas a escoger como el nuevo titular Defender? He venido hasta aquí para ayudarte a entrenarlo y darle unos consejos, misión que Gustav mismo debía haber hecho...

El tono de Korven era algo seco, serio, ya no era fraternal como siempre lo hacia, pero no conocía al nuevo entrenador, así que no tenía reparos en ser un poco más distante, aparte del hecho que estaba desarrollando ésto como una terapia de duelo, el vacío que Gustav dejó tarde o temprano tenía que ser llenado.

-Muchacho, no tienes que decirme cosas que ya se.- El profesor levanto una hoja azul que tenia la foto de Korven de el año en el que salió del equipo. Su gorra le tapaba la visión del muchacho cuya voz se le hacia bastante... irritante, al menos por el tono en el que se presentaba.

-Se bastante bien quien eres, amigo Pålsson.- Trato de pronunciarlo lo mejor que pudo, mientras se sentaba de frente al nahual, apagando la televisión. -Y esto no es reno, por mas rica que sea esa carne, muchacho. Vi las notas de Joe acerca de ti. Son bastante buenas, si eh de decirlo, aunque mi primo le echaba flores en sus notas a cualquier alumno, que si lo sabré.- Una ligera sonrisa se enmarco en el rostro de Víctor, una sonrisa llena de nostalgia, la cual en realidad no duro nada, por ser cambiada a un rostro un tanto mas enojado y triste.

-Dime, Pålsson, ¿que te hace creer que yo podría necesitar ayuda para entrenar a estos chicos?- Victor se levanto de su sillón, estirándose y bostezando un poco, luego camino hacia Korven - No lo tomes a mal chico, sé que tus intensiones son buenas pero, no crees que por algo me dieron el puesto de maestro?- El gran nahual se puso enfrente de Korven mirándolo a los ojos. -O crees ser mejor que un maestro...- Se podía ver que aun con su intimidante presencia, el chico no parecía inmutarse muy notoriamente, aunque la tristeza estaba escrita en toda su cara. Al notar eso, una ceja de Víctor se enarco y le puso una mano firme en el hombro al chico. -Sígueme- Le dijo seguido de un gruñido.

Caminaron en silencio hasta la entrada del campo de Mugby. Y en la entrada principal, donde hacían sus entradas triunfales los equipos, el entrenador volteo a ver a Korven. -Por que te interesas por esta generación de jugadores, que no te corresponde?- Lo miraba con frialdad a los ojos, quería una respuesta coherente y sincera del chico venado.

Korven mira a los ojos al entrenador y después voltea a ver el campo. Empieza a recordar los viejos y buenos tiempos con los compañeros de equipo.

-Victor, nunca me he sentido mejor que un maestro, estoy lejos de serlo. La misión que está escrita para mi vida según mi tribu es ser un guía espiritual, capaz de guiar a la población sami completa. No puedo ser maestro, pero sí un excelente líder y guía. Aprendo muy bien de mis errores y de los errores de los demás.

Korven respira y espera que con esto no sea rechazado por el entrenador.

-En realidad, si he de confesarlo, el mugby ni me interesa tanto. Solo fue un juego para mí, y como cualquier juego, me encantaba divertirme, pero para mí, mi prioridad siempre han sido mis notas. Cuando me empezaron a crecer los cuernos en cuarto año, sentí un alivio cuando tuve que renunciar al equipo de mugby, pues las cosas se ponían más serias y los entrenamientos más duros. Era el mejor defender de Srad en mucho tiempo, modestia aparte, pero me encargué de que mi sucesor fuera tan bueno o inclusive mejor que yo, debido a su conformación física... era una lata hihihi... Yo hago esto no tanto por mí, sino por él, por cumplir la tarea que él mismo debió haber hecho al finalizar este año y otorgarle su puesto a otro chico. ¿Me entiendes?

Korven voltea a ver a los ojos a Victor.

-Por favor, déjame hacer ésto contigo... tú obtienes un excelente entrenador asistente y yo logro llenar ese vacío que me deja la ausencia de Gustav y *cof* mefirmaselserviciosocial...

Víctor miraba fijamente al chico mientras decía su discurso. Al principio cruzo miradas con el encarado nahual, con los brazos cruzados, para luego ocultar sus ojos bajo su gorra oyendo con atención lo que tenía que decir.

Al oír que Korven en realidad no era apasionado por el deporte, movió ligeramente las orejas, eso había captado su atención mas que otra cosa. Oír que su razón era el difunto Gustav, en verdad le había llegado de cierta manera, recordando un poco las cosas que vivió el en sus años en furukawa. La perdida de alguien puede cambiar a los niños para hacerlos mejores adultos. -Ya veo.- Respondió secamente a la pregunta de Korven, aun con los ojos cubiertos por su gorra.

Pudo ver como el Nahual lo volteo a ver, levanto la frente, y lo miro sin inmutarse, hasta el momento en el que el chico dijo sobre el servicio social. A lo que el Nahual largo una fuerte carcajada y le puso su pesada mano en el hombro. -Así que ya salió el peine.- Víctor golpe el borde de su gorro para acomodarlo y descubrir sus ojos. -Muy bien, Korven Pålsson, si la determinación que me expresas es sincera, entonces accederé a tomarte como mi asistente de entrenamientos.- La mano del nahual apretó fuertemente el hombro del chico, mientras le mostraba una sonrisa con los colmillos notoriamente exhibidas.

-Pero no solo me ayudaras a entrenar a la bestia de Lucas, quien es el perfilado en volverse el siguiente defender. Si quieres que esa sea tu prioridad, me viene sin cuidado, mientras no descuides de entrenar a los demás integrantes que yo no este apoyando, y no solo dE Srad, sino también de las demás fraternidades.- Víctor empezó a caminar hacia el centro del campo, y mientras le hacia un ademan como diciendo "sígueme" al chico, apareció en un tenue brillo azuloso una tabla con unos papeles y una pluma roja.- También me ayudaras a las clases de los demás deportes. Natación, gimnasia y tenis, te daré una lista de cosas por hacer previas a cada entrenamiento, tendrás que tener los balones para cada entrenamiento listos y a la hora, el campo y lo demás corre por mi cuenta.- Mientras hablaba, escribía algunas notas para que no se le fuera a olvidar lo que estaba diciendo. -Si estas de acuerdo con esto o si tienes alguna pregunta de una vez mi chavo. Por que dudo que digas que no.- Dijo ya en el centro del campo de entrenamiento con una segura sonrisa de victoria, y un problema posiblemente menos.

Korven escuchaba boquiabierto la cantidad enorme de tareas que tenía que seguir.

-Estoy de acuerdo, pero espero que estés consciente que puede haber clases en las que choque mi horario y no pueda venir a esas, pues es el último año y me gustaría salir con excelencia. Por otro lado, no me causa problemas si decides aprovechar los fines de semana. La verdad es que me aburro mucho los sábados y domingos, así que no estaría mal. Realmente, no venía con la intención de hacer el servicio social, sólo se me ocurrió al momento.

Korven se sentía más tranquilo, al menos estaría más ocupado y seguramente, habría algún momento en que podía pedirle un día libre o dos a Victor, pero bueno, todo a su tiempo. Korven ya pensaba en salirse del Instituto y regresar a la tribu en Laponia, pero parece que ahora tenía una misión en Furukawa.

Korven le da la mano a Victor.

-Bueno, parece que tenemos un trato.

Victor apreto con una brutal y euforica fuerza al joven nahual.

-Es correcto, mi estimado, tenemos un trato.-

El maestro le puso su otra mano en el hombro. -Ahora, acerca del defender de tu fraternidad. Eh entrenado con ellos y hablado lo suficiente para decirte que el siguiente, que Gustav iba a entrenar, iba a ser Lucas. Como tu sabes, yo solo los guio, los alumnos son los que entre si se designan sus papeles, y ellos empezaban a trabajar uno con el otro.- Una vez que dejo de darle la mano a Korven, Victor se la lleva a la nuca rascandose un poco. -Ciertamente tenian muy poco trabajando juntos, asi que es buen momento en el que te ofreciste a ayudarlo. un mes mas y estaria muy acostumbrado bajo mi tutela.- dijo con una sonrisa traviesa

-Dime, conoces a Lucas? - Del bolsillo saco su gran cronometro, y al darle un click, cambio a la hora. -Hmmmm... Creo que es buena hora.- Metio el cronometro y saco una esferita con una "S" inscrita en tinta roja. La apreto levemente y esta empezo a cubrirse en mana indigo y azul. -Este truco familiar lo haz de conocer.-

>Mana indigo+Azul: Calling<

Al lanzar la esferita al piso, se abre un portal que empieza a aventar aire de el. (SE AGREGO A LUCAS AL POST)

Korven normalmente se reiría de la situación y le seguiría el juego a Lucas, pero parecía que ahora tenía una nueva posición.

Tres dagas de hielo son lanzadas a un lado de Lucas, tan cerca que pudieron haberlo lastimado, pero la precisión de Korven era mítica.

-¡Esa no es manera de hablarle a tu entrenador ni a tu mayor! ¡Levántate en este momento, pues has sido seleccionado... has sido seleccionado como el nuevo Defender del equipo de Srad! ¡Es para mí un honor ser quien herede el puesto!

Korven no suele ser rudo, pero parece que Lucas necesita mucha disciplina, así que decide entregarse a ese punto débil.

El entrenador solo veia de brazos cruzados, riendo muy para sus adentros al ver la reaccion de Lucas al estar en el pasto. Cuando vio las dagas de hielo volar hacia el, solo saco un silvido como de sorpresa, no tan sorpresiva, sabia que Korven estaria ancioso de entrenar al nuevo defender pero su severidad, se le ahcia de cierta manera exagerada.

-Lucas- Empezo a hablar, con un frio y serio tono de voz -tu tambien haz estado faltando un poco, y por lo mismo no creo que entiendas lo importante que haro es tu nuevo cargo, eras el suplente del defender y ahora seras promovido. Bueno, eso tendrias que ya haberlo hablado con Hazel, si tan solo el tambien viniera.- Se acomodo la gorra en inconformidad por lo que acababa de decir, se le hacia decepcionante que el capitan estuviera faltando sin avisar, aun teniendo razones obvias para hacerlo, pero ese era tema que tenia que discutir aparte con el.

Victor le ofrecio la mano a Lucas para levantarse. -Arriba muchacho hay que platicar-

Lucas no se mueve, al ver que lanza las estacas de hielo pero al parecer no fue intención dañarlo. En es momento el nahual comprende en la situación que estaba que no era un sueno; eso hace que se sonroje un poco por la actitud que tomo.
A Lucas le brillan los ojos eso era lo que estaba esperando desde que había entrado, pero en la situación en la que lo habían seleccionado no se le hacia la mas apropiada , Lucas hubiera querido que lo seleccionaran por igualar o superar a Gustav.
Lucas toma la mano de Victor y se pone de pie.
“Es un honor haber pensado en mi para en nuevo defender” les comenta seriamente “Cosa que no se arrepentirán, Es verdad que he faltado señor pero eso ya no volverá a ocurrir… No defraudare su confianza y mucho menos quedarle mal a Gustav que fue como un Hermano para mi “
“Pero tengo entendido que para poder estar en el cuadro titular oficialmente, el capitán tiene que aceptarme…” da una pausa “En estos momentos en que situación se encentra Hazel? Si no es ninguna pregunta incomoda?”

Korven frunce el ceño y voltea a ver a Victor a los ojos, como tratando de pedir una disculpa por adelantado de lo que iba a decir.

-Lucas...- dice Korven al acercársele- creo que no importa mucho lo que haga o diga Hazel bajo estas circunstancias. Tú estuviste ahí y así como yo, pudimos haber muerto como Gustav. El que hayamos sobrevivido fue muy buena suerte o el que él haya muerto fue muy mala, cualquiera de las dos no me conforta en lo más mínimo, y Hazel está cerca de ser juzgado por la imprudencia que le costo la vida a Gustav. Yo te entrenaré, a falta de Gustav, pues como mi sucesor, yo lo ayudé a entrenar a él, si te parece bien. Ahora, en estos momentos la última palabra la tiene el entrenador Victor, no Hazel.

Korven solo le pone una mano en el hombro a Lucas. Sabe que esta oportunidad no la tendría de no ser por la aprobación de Gustav al terminar el quinto año o en este caso, su inminente muerte.