Vispera de Vacaciones -Privado

Lo único bueno de todo esto es que gracias a los ataques y tanta cosa que había sucedido en la escuela, tuvimos mucho tiempo para faltar a clases y no solo eso, ya solo faltaba una semana para que nos dieran nuestras vacaciones de invierno, insisto no es que me hiciera gracia lo que paso pero de cierta manera empezaba a acostumbrarme a que mientras “yo” estuviera aquí, la escuela no volvería a estar segura.
Pero bueno, volviendo al tema principal, ya estaba acostumbrado a las vacaciones que se daban en Furukawa o al menos en mi caso, representaba una oportunidad para hacerle travesuras a la Directora Aria y estar con mi hermanito, anteriormente era la época en que podía pasar más tiempo con Hazel, Gustav y Sebastyan ya que eran libres de quedarse en el rancho o llevarnos con ellos a sus dormitorios, probablemente, esta ocasión no sería igual, tendríamos un nuevo invitado, Socrates a quien obligadamente arrastraría hasta Little Monsters junto con nosotros dos, no es como si tuviera mucho que hacer de todas formas, sin contar que de cierta manera, era el lugar más seguro de todos…

Poco a poco todo había ido regresando a la normalidad, al principio no me habían permitido ver a Socrates y he de admitir que eso me había tenido algo frustrado pero conforme la situación se fue enfriando hasta nos hicieron regresar a las clases.

Y si, aunque no lo crean, no había estado poniendo atención a nada de lo que decía el director y tan pronto termino la clase, me levante de mi asiento y jale a Socrates hasta por los pasillos camino a la cafetería.

-Sigues actuando raro…- Le dije serio. –Que te paso?-

Cada dialogo del director en una de las ultimas clases del año era obstruido por los recuerdos de aquella noche que no podia olvidar. Al momento que el Instituto fue invadido por lo que segun Noah fue culpa del Dogma Crucis, para mi fue una de las noches mas estresadas y horribles de mi vida.

Por un instante, sentia como si hubiera despertado de un letargico sueño placentero que ahora se volvia la fria realidad. Observaba mis manos, escuchaba mi respiracion y todo me parecia diferente ahora. Mis recuerdos eran una licuadora que se confundian con aquellas imágenes y sobretodo, el rostro de esa niña de pelo rosa que cada vez era mas visible al paso del tiempo. La veia en las esquinas, en las ventanas y hasta cuando cierro los parpados. La angustia de no poder divulgarle a nadie que probablemente me estaba volviendo loco me mortificaba.

Fue entonces cuando su mano me tocó y senti que me regresaba el mundo. Ese era el poder mas fuerte de Noah Fenian, ser mi ancla en este revoltijo de emociones. Sonrei al escuchar aquellas palabras y apreté la mano.
- Solo estoy cansado, como estas tu? - le dije con una sonrisa ligera - Ya casi es Navidad... pero dijiste que ustedes no la celebran, verdad?

-Yo celebró los dos y Aris...- Confesé algo pensativo. –Pero en la escuela no…- Comenté después, digo en nuestro caso era de imaginarse, festejar dos veces significaba una doble oportunidad de regalo, a final de cuentas, había vivido entre Darkhas, igual que Rhia y ella se había encargado de recordármelo durante cada navidad.

Seguí caminando por los pasillos, la escuela se veía algo vacía, la verdad es que a pesar de los esfuerzos de la OMST e incluso de los profesores por calmar la situación, en verdad había sido un fuerte golpe y había afectado a casi toda la comunidad estudiantil, muchos vivían con miedo, mientras que otros habían partido antes de lo esperado, tal vez muchos de ellos, no volverían, la prensa había hecho una excelente labor desprestigiando al Instituto.

Doble en una esquina y volví a tomar a Socrates de la mano. –Oye, vamos al baño- Dije arrastrándolo conmigo aunque al darme cuenta de lo que había dicho, me avergoncé y lo volví a soltar, de pronto me había sentido como una mujer. –O-osea espérame afuera en lo que voy y aha… no me refería a que entraras conmigo…- Intente cambiar de tema rápidamente, mientras cruzaba el umbral de la puerta.

-Has visto a Lynn?-

- Es real tu aclaración? - pregunté enarcando una ceja, intentando disolver mis angustias al menos por un momento, al menos no con él presente. Me rei después de eso y lo empuje hacia al baño para que el entrara mientras platicabamos.

- Pues solo la he visto en las clases que tenemos juntos - dije entrando y lavandome las manos, necesitaba sentir algo, agua, lo que fuera - Le pregunte si estaba bien y me dijo que ella no escuchó nada. Parece ser que hubo una especie de hechizo de sueño o algo asi ya que muhos no se dieron cuenta hasta la explosión que hizo que todos los miembros de la OMST se desmayaran...

Todo era muy confuso para mi y no hablaba de mis angustias, no entendia mucho sobre estos atentados y por un momento recordé a mi papá... sentí un nudo en el estomago y me estremecí al casi olvidar su rostro, me senti avergonzado de no pensar en él en tanto tiempo.
- Todo esta muy raro Noah... muy muy raro...

-Qué tiene?- Dije con la cara toda roja y adentrándome en el baño. De hecho, me metí en uno de los cubículos en lo que aplacaba mi sonrojo e hice mis necesidades mientras lo escuchaba hablar, no es como si me diera pena que me viera, digo, eso ya había quedado más que claro pero por alguna razón había sentido una necesidad de ser un poco más discreto, a pesar de que solo iba a orinar me encerré en uno de los cubículos.

Luego salí a lavarme las manos y trate de no mirarlo mientras lo cuestionaba. Los dos estábamos parados frente al lavabo, podía verlo a través del espejo aunque trataba de bajar la mirada rápidamente esperando que no notara que lo estaba observando.
-Estas asustado, verdad?- Seque mis manos con un pedazo de papel que corte y luego lo tire, tratando de no darle mucha importancia.

-Todo va salir bien, no te preocupes. Voy a protegerte! Te lo prometo, además los maestros también lo están haciendo.- Dije sonriendo, intentando creerme lo que estaba diciendo.

-Además, lo peor ya paso! Ahora vienen vacaciones y navidad y todo eso y quiero que lo pases conmigo y Aris, es de mala suerte pasarlo solo…- Le dije ahora si volteándome y poniéndole mano sobre su hombro.
-Yo te voy a cuidar… te lo dije desde casi el primer dia…-

Aun cuando sus palabras eran tranquilizantes para mi, sentia una especie de angustia que no podia explicarle en su totalidad. Sabia que las paredes escuchaban y todo parecía indicar que Noah estaba lo suficientemente vigilado. Era una sensacion que le daban los profesores para con él.
- Maestros.. si.. - dije en un murmuro poco aprobatorio, en verdad es que ahora no confiaba tanto en ellos desde que vi aquel lugar. Ellos TENIAN que saber algo, era tan cerca del Instituto y concordaba con el hecho de que es un bosque PROHIBIDO por ellos...

- Has sentido que no eres quien debes ser? - pregunté a Noah viendolo a los ojos - Tal vez suene estupido.. pero... te ha pasado que cuando despiertas sientes que acabas de dormir y no al reves??

Lo ultimo que queria era incomodarlo, pero era probablemente mi unica valvula de escape.
- Siento raro.. Noah.. algo no esta bien en mi... y siento que los profesores saben algo..

Y eran este tipo de situaciones las que podían decidirlo todo, pase saliva con pesadez y decidí darle prioridad a la misión pero era algo que tendría que aclarar después, tal vez ni siquiera Furukawa estaba enterado y Socrates solo estaba manifestado eso que yo sentí cuando el mago me hablo, quien sabe, todo podría estar relacionado.

Lo despeiné un poco y negué con la cabeza.

-N-no, no me ha pasado.- Le dije muy seriamente. –Pero, por qué crees que los profesores saben algo?-

No, no, no, no podía decirle nada. Me detuve un poco y lo esperé para caminar a la par con mi amigo. Me notaba pensativo…
-Tal vez es magia índigo, no sé, hay muchas cosas que no sabemos de la magia, pueden ser muchas cosas creo. En una escuela como esta tienes que acostumbrarte a las cosas raras. Ehm… sabías que Aris es mitad Inccubus? Los inccubus tienden a alimentarse de aha… y por su naturaleza, todos los demonios se alimentan de algo en particular, todavia no se muy bien que come Aris o si come las dos cosas. No sé, este mundo está lleno de secretos y cosas que no conocemos, no deberías asustarte pero… si tenemos que investigarlo…-

- ¿Come de Aha? - pregunte extrañado. No esperaba saber que Aris era esa clase de demonios. Pasé saliva pensando idioteces pero me volvi a enfocar. Un dejo de nervios comenzaba a invadirme al sentir incomodo a Noah, por un momento pensé que tal vez sabria algo pero era imposible. Verdad?

.. Verdad?

- Estas bien? Como que te quedaste ido... - le dije intentando presionarlo sutilmente - No se... siento extraño.. como si de repente mi propia mente me escondiera cosas de mi que siento que sé, pero que no realmente... a veces siento que me gusta pensar e imaginar mis recuerdos como si fuera... otra persona? Pero es raro, yo no hacia eso...

Baje un poco la mirada, un poco agotado.
- Tal vez me estoy volviendo loco... tal vez es parte de mi naturaleza demonnio? Hasta este momento estoy pensando que no se nada de ser un demonio.. solo tengo una cola...

-No! No! Estoy bien solo estaba pensando. Es algo complicado- Le dije, no sabía por dónde empezar a explicarle.

-Mi padrastro era un Incubus, Aris es muy parecido a él, creo que también es un Incubus y si es un Incubus pues… tú sabes de que se alimentan. A los demonios los dividen por categorías muy relacionado a la emoción que los domina y a muchos de ellos les dan ciertos cuidados especiales en el ranchito por motivos diferentes, eh… al principio no sabía porque, cuando me entere de Aris investigue un poco más, recuerdo que cuando estaba conmigo no le prestaban tanta atención pero normalmente si lo vigilaban más que a otros niños – Le explique haciendo uno que otro movimiento con las manos y aunque no lo parecía, todo esto tenía un porque.

-Como sea, no estoy muy seguro tampoco, nadie me ha dicho que tipo de demonio es, ni tampoco estoy seguro de que se alimente del…sexo, creo que esa clase de cosas quedan en los archivos de la escuela pero lo he pensado por esos cuidados especiales que te digo que le daban pero lo que te quiero decir es que hay muchas cosas que no sabemos, de cierta manera, cuando llegas aquí al Instituto es como si te dieras cuenta de que todo lo que te han dicho y has vivido es una mentira. Aris tampoco sabe nada de sí mismo y tenemos más tiempo que tu aquí- Luego suspire, en verdad quería ayudarlo pero había muy poco que yo pudiera hacer.

-Por qué no le preguntas a Taylor? O Por qué no vamos con el maestro Fado? Él es el que sabe más de esas cosas que tienen que ver con la mente…-

- No, creo que mejor no.. - dije dubitativo, realmente sentia que los maestros no era la mejor opción, no después de esas imagenes. Me moria por contarle a Noah pero al mismo tiempo queria limitarme a no involucrarlo. Suficientes problemas tenia para ir a tragarse los mios. Suspire y lo miré a los ojos.

- Prometeme por favor que te cuidarás siempre... y... - dije en una pequeña pausa - que nunca me dejarás solo... tengo miedo de que esto no sea solo cansancio o algo normal, la palabra paranormal ya deja de tener sentido en este lugar... solo ... no me dejes solo nunca... esta bien?

AL decir eso mis ojos se mojaron un poco, era una plegaria de ayuda, de paz, mi cabeza giraba y lo unico que necesitaba era una mano, un abrazo.
- Perdona si te incomoda pero no tengo en nadie mas a quien coniar mas que en ti y Aris... al menos... asi me siento en este momento...

-Bueno… como tú quieras…- Le dijo serio, como quiera, más tarde me encargaría de investigarlo yo por mi propia cuenta. Luego de eso, lo escuche atentamente, asentí a cada frase que Socrates decía sonriéndole de lado, casi estaba seguro que algunas de ellas, no podría cumplirlas y aunque dolía tener que mentirle, era lo mejor que podía hacer para tranquilizarlo.

Le toque la mejilla dándole un ligero golpesito “animo”, eso era lo que quería transmitirle y después le deje la manita recargada en el hombro.

-Claro que no tonto… somos…amigos…- Dije con dificultad, si me lo preguntaban, yo deseaba que fuéramos algo más que solo amigos. Le di un jalonsito en el hombro para que siguiéramos caminando y volví a ponerme a su lado. De por sí ya nos tachaban de “raros” por lo cercanos que éramos así que en vez de abrazarlo, le deje la manita recargada alrededor de su cuello como la mayoría de los niños hacían.

-Vamos a la cafetería, creo que Linn tiene libre esta hora, chance y la encontramos ahí.-

-Si... gracias.. - dije un poco incomodo. El titubeo en.las palabras de Noah y la poca fuerza que empleaba me estresaba, probablemente estaba presionandolo mucho y lo ultimo que queria era asfixiarlo. A final de cuentas era mi problema y no el de él...
Camine un poco intentando despavilarme cuaneo un recuerdo se vino a la cabeza. Voltee a ver a Christian y el odio corrio por mis venad... ¿Por que de todas las chavas del salon tenia que gustarle Pristine? Lo observe con furia.. por que parecia no importarle mis sentimientos. Cuando decidi acercarme reaccione y me di cuenta que era Noah... Noah... quien es Christian.

Palideci cuando me di cuenta que por un instante todo se habia movido de su lugar. Mi mano se puso fria al momento que tomab la mano de Noah y sudaba frio. Le sonrei intebtando dejar atras ese incomodo momento personal y lo jale.
- Si.. creo que Linn esta en la cafeteria. Compremos algo de comer... siento ganas de algo dulce...

No entendía mucho de lo que le pasaba a Socrates pero realmente empezaba a preocuparme, lo tomé de la mano y sentí el sudor frio en su piel, tal vez estaba enfermo o algo, empezaba a creer que la enfermería era una mejor opción pero decidí darle por su lado…
-Sí, vamos!- Le dije aceptando la propuesta y lo encaminé hacia la cafetería. A pesar de todo no solté su mano, tenía miedo de que de repente se desmayara o algo por estilo, se veía muy pálido y esta vez no me importo que otros estudiantes no vieran “tan” cerca.

-Pues Linn no se ve por aquí pero bueno, que quieres de comer?- Pregunté, dejando que el escogiera primero.

-Si quieres podemos comer en tu habitación y ver una película o algo, digo, por si te sientes mal… te ves un poco pálido…más que de costumbre…-

-No .. estoy bien... - le dije sonriendole fragilmente- Me han estado dando estos como.. "ataques" de repente en donde me confundo y veo cosas que no son, luego me siento debil y en unos minutos se me quita. Me han estado dando desde que me encontraron en el bosque el día del ataque.. no te preocupes...

No me gustaba la idea de tener que decirle esto, pero si eventualmente me moria, me volvia loco o algo extraño era mejor que tuviera algun indicio.
- Ahorita se me pasa.. vayamos con Lynn.. ya no quiero estar encerrado.

Era extraño que yo dijera eso, pero mi cansancio y mi confusion no eran tan fuertes como mis deseos de recuperar la vida bonita que llevaba en el Instituto. Tal vez era poca pero en este momento era lo unico que habia sido real al 100%. Nada antes del Instituto se sentia factible, ni siquiera mi padre y comenzaba a frustrarme. No quería que eso fuera cierto pero hasta no sentir las cosas en paz, haria lo que fuera por coexistir como Socrates Raven el estudiante.
- Lo siento.. no te asustes por favor.. estaré bien.. - le dije apretando la manita de Noah.