(Cap 4) Amenaza (Hazel y Jugadores 0/2)

Aquel impacto del Profesor Furukawa había hecho que Hazel girara por los aires y aterrizara en el area de alimentos, fuera de la oficina administrativa. Aquella noche todo estaba ya bien ordenado con sillas arriba y solo algunos fantasmitas aun recogiendo los desastres que los niños de Little Monsters hacian ahora que vivian ahi.

Todo estaba muy tranquilo y callado, sin contar que los peones de la OMST se encontraban resguardando aquel lugar. Todo parecía estar bien hasta que...
- Hey... el jefe dice que ya no tenemos que fingir.. que tenemos que ir a encerrar a los estudiantes en las fraternidades - dice un peon bastante bajito.
- Ah.. que flojera, de por si me tocó un soldado todo flacucho... ¡Que lo hagan los demas! - dice otro quien comienza a rascarse la panza.
- Al menos te tocó de tu mismo sexo, panzón, a mi me tocó un hombre negro! - dice otro con una voz mas afeminada, siendo el soldado mas grande y fornido de tez obscura.

Los tres soldados comienzan a romper filas y a estirarse. La hora del teatro había terminado y estaban listos para causar toda clase de problemas.
- Uh.. hay alguien ahi? - pregunta el mas bajito apuntando su arma. Una pistola de mana que utilizaban los miembros de la OMST como defensa. Podía hacer mucho daño si no sabias manipularla sabiamente. - QUIEN ES?!

Un destello de mana azul aparece detrás de los guardias.

-I am the reaper...

Mana Negro: *MOOTTORIMYRSKY AIKAKAUSI JÄÄDYTÄMINEN!!!*

Korven se había teleportado detrás de los guardias, tomándolos desprevenidos, para después patearlos con fuertes patadas que lanzaban destellos de mana negro que quemaban como el fuego más caliente o el hielo más frío.

Korven tenía un jamón en su mano izquierda. Había ido a robar algo de comida, costumbre que había adoptado para calmar sus ansias desde la muerte de Gustav. Al terminar su ataque le da una mordida.

Mana Índigo: *VIIKINKI MUUNNOS*

Con su mano derecha toma su espada y se lanza a toda velocidad lanzando cortes hacia los peones, hasta llegar con el gordo, al cual rodea su cuello con su brazo izquierdo por detrás y le punta de su espada en la espalda.

-Si no quieres que te mate ahora mismo, es mejor que hables, animal... Así que dejarán de fingir, ¿y cuáles son sus verdaderas intenciones?- dice Korven con una voz helada. Esperaba que alguien más estuviera cerca porque no quería (del todo) que terminara siendo un baño de sangre. -Y cuidadito que alguien intente hacer algo imprudente, porque me reviento al panzón...

-Lo sé... debi haber tomado un plato para el jamón... mhmhmh...

Al caer, Hazel se soba un poco la cabeza, habiendo caído de nalgas en medio del área de alimentos. Justo cuando iba a ponerse de pie y hacer un ruido de incomodidad por el golpe, puede escuchar las voces de los peones, por lo que lo más cautelosamente posible el chico gatea hasta detrás de una mesa para quedarse escondido ahí.

"Encerrarnos en las fraternidades...?!" piensa el pelirrojo apretando los dientes. Eso no podía estar bien... si ese era el plan, en ese momento él era el único en la escuela que sabía sobre esto, y aparte tenía que encontrar a Noah... no podía quedarse a perder tiempo con ellos, tenía que llegar al niño y de alguna manera avisarle a los profesores y los demás alumnos de lo que la OMST planeaba.

Pero, rayos, ya lo habían visto. El chico se pega más a la mesa ante las advertencias del soldado. Miró de reojo la puerta, tenía que salir corriendo lo más rápido que pudiera para perderlos, pero sus armas de fuego iban a ser peligrosas sin magia.
En ese momento escuchó otra voz bastante familiar.
-Korven?!- pregunta susurrando al ver como el reno atacaba a los guardaespaldas. Y luego Alison. Wtf?! Qué hacían ahí a esa hora?! Bueno... de hecho, fuera el motivo que fuera, qué bueno que estaban ahí a esa hora. Le ayudarían a comprar tiempo.

-Impulse!- grita Hazel dándole un golpe a la mesa junto a la que se había escondido, mandándola a volar en dirección al soldado flacucho aprovechando la distracción de sus compañeros.

-Venao! nos atacan, corre la voz por donde puedas, los veré a los dos en el área médica!! Necesitaré toda la ayuda que pueda!!- dice el pelirrojo en voz alta mientras se dirigía rápidamente a la puerta, y ya estando ahí, voltea para atrás con media sonrisa -Perdona que no me quede, tengo alguien a quién encontrar!!- dice al mismo tiempo que aceleraba, esperando sus dos compañeros fueran suficiente como para mantener a los soldados totalmente inutilizados.

Los ataques de Korven y Hazel logran distraer a dos de los soldados lo suficiente para que el australiano saliera de escena (el area de comida es al aire libre 8U) mientras que el que ahora era rehen escuchaba las amenazas del nahual con calma.
- Ah si? - dice acercandose un poco, dejandose pinchar por la espada un poco. Un hilillo de sangre comenzaba a correr por la hoja - Cargarías con la culpa de la muerte de gente inocente como tu amigo el pelirrojo?

El hombre observaba con un rostro de burla al nahual, tomando la espada con la mano y sonriendole, mientras que los otros soldados se levantaban con bastante molestia.
- Uno de ellos escapó.. - dice el moreno.
- No importa, el Instituto esta repleto, no hay nada que pueda hacer con gritare a los demás.
- ¿Que hacemos con la mujer? - pregunta el bajito limpiandose la sangre de la boca.
- Yo me la desgreño! - dice el negro fornido - Como se atreven estos mocosos a lastimarnos.
- No no, esperen - dice el soldado normal (que no esta panzón, dice que esta todo flaco 8U) aun con la espada apuntandole - Y bien joven Nahual, puedes matarme si quieres pero no creo que eso cambie las cosas... Si haces un movimiento en falso atacaremos a la chica, creeme que no es tan sencillo como crees.

El ambiente comienza a ponerse tenso mientras que la sangre del soldado sigue corriendo por la espada de Korven...

Imprudente... siempre imprudente... ¿cómo cree que podrá sobrevivir solo y sin poderes? Es bueno peleando, pero no podrá vencer a la OMST así...

Korven comenzó a sudar mientras tomaba una decisión. ¿Qué creían que eran? ¿Bebés en pañales? Definitivamente Korven y Alison tenían ventaja física en cuanto a los humanos, inclusive con el negro enorme, si Korven se convertía en reno, podía doblarle el peso... pero era bien cierto que la OMST tenía magos muy poderosos, y era ahí donde se sentía en riesgo. Un humano podía vencer sin problemas a un nahual místico si tenía la instrucción adecuada.

...pero yo no soy cualquier nahual, y si tengo que morir por defender la escuela como lo hizo Gustav, lo haré...

La espada desaparece y le da un empujón al peón de la OMST, no un empujón agresivo, solo para hacerlo avanzar un par de pasos, mientras que con una expresión tranquila, Korven invoca enormes pilares alrededor de los agentes y él, siendo el último lugar donde se cerraría la enorme barrera circular de hielo justo detrás de él.

-Alison... deberías ir a ayudar a Hazel, él solo no podrá hacer mucho sin sus poderes... ahora, si te quieres quedar, es el momento de entrar...- dice al momento que estira su mano hacia Alison, invitándola a tomarla- Y ustedes, me la ponen más fácil ahora que sé que solo los tengo que noquear en vez de matarlos, así que más vale que se preparen para el infierno de hielo...

Las columnas hicieron que los peones retrocedieran algunos pasos. Aun cuando su cuerpo fuera prestado su mana no era tanta como la del nahual. ¿Que clase de escuela era Furukawa con seres con tanto poder magico?. El pelón que habia sido decidido como el lider usa un hechizo de mana negro haciendo que sus puños se enciendan en flamas.
- Debemos detenerlos! Si no lo hacemos el jefe se decepcionará de nosotros!- dice al momento que lanza una enorme llamarada hacia las columnas levantando vapor y luego corriendo en dirección a Korven.

Por lo mas alto, se encontraba el otro quien habia sacado unas alas y ahora invocaba un par de lanzas en dirección al reno. Al tiempo que el mas alto (el negro afeminado) habia desaparecido y estaba a punto de atacar a Alison por la espalda con una navaja...

Apenas Korven toca la mano de Alison, Korven en un tono muy bajo pronuncia las palabras:

-Mana Negro + Mana Gris- *Absolut Zero...*

De golpe, la temperatura en el área comienza a bajar, llegando a los 0°C. Era muy pronto para la sensación térmica, pero lo empezarían a sentir después. Al menos el que tenía los poderes de fuego no lo sentiría tanto, pero los otros dos estarían más expuestos.

Alison es inmune al hechizo gracias al contacto mientras lo invocaba. Korven decide soltarla al ver la amenaza.

-¡Ten cuidado, Alison!

-Mana Gris- *ARTIK PEILATU ALALLA!!!*

Un campo de fuerza protege a los chicos de las lanzas mágicas del mago volador, pero su efecto no sería el mismo contra el mago de las llamaradas, puesto que rebota solo ataques y seres mágicos, pero el peón era tan humano que podía atravesarlo. Korven muerde por última vez su jamón.

Lo siento, jamón... nuestro romance fue corto pero intenso </3

Korven lanza el jamón en dirección de la cara del pelón.

El ambiente comienza a cambiar radicalmente lo cual los tres soldados parecen percibir de inmediato. Sin embargo, los crudos movimientos de los estudiantes de Furukawa logran sorprenderlos. El peon negro vuela algunos metros debido a la potente explosion de las bolas de fuego que impactan en su espalda, mientras que el que atacaba a Korven recibe el jamonazo sorprendiendolo y evitando que tenga oportunidad de reaccionar.

Dando unos pasos hacia atras, el peon aprieta los dientes observando al nahual. Comenzaba a molestarle que un simple mocoso de una escuela ridicula se creyera todo un mago. Hace un movimiento con sus manos y una serpiente de fuego brota de estas.

Mana Negro: Fire Snake

Apuntando al reno este lanza con gran velocidad su tecnica golpeando el estomago del reno y provocandole un potente ardor. Las llamas de la serpiente se tornan verdes y comienzan a carcomer la ropa de Palsson.

Por otro lado, el peon negro aun adolorido se levanta y observa a Alison, detestaba pelear contra demonios por ser tan escurridizos, sin embargo no contaban con el tipo alado que ahora apuntaba una lanza en direccion a Alison, disparandola con gran velocidad. Esta no logra reaccionar tan rapido como para pronunciar su hechizo azul y recibe una herida en su brazo.
- Rindanse mocosos de Furukawa! Si se detienen ahora no tendremos que matarlos...

-ASDFASDFASDFGHJGWURJKJSF!!!- Korven intenta por todos los medios apagar el fuego que quema su bufanda y su camisa, pero al ver que nada sirve, se la quita como puede rompiéndola.

La temperatura ha bajado otros 10 grados más, a -10°C. Korven se encontraba con el torso desnudo y no sentía nada de frío, al igual que Alison.

-Pfff... si al menos supiera las razones de su batalla... pero ¿no creen que atacar jovencitos está fuera de lugar?

Korven analiza la sitación. Dejarlos pasar por su vida. Le parece justo, aunque no sabe cuáles son sus intenciones ni sus motivos. En todo caso, él alegaría defensa propia, aunque el hecho de que fueran inocentes manipulados le provoca un disgusto muy grande. Al menos, por ahora, no tenía ni una razón para traicionar al instituto ni a Furukawa, que se hubo mostrado paciente y comprensivo en su reciente situación. Se la debía. No podía lastimar a los peones, sentía lástima por ellos. Si fueran los magos en sí, seguramente hubiera ya tratado de matarlos, pero solo intentaba desmayarlos con Absolut Zero. Solo tenía que tratar de mantenerse en pie hasta que la temperatura llegue a -40 o -50 grados.

Korven de alguna manera solo podría noquear al negro. El volador y el de fuego le costarían mucho trabajo, así que observa que el de fuego derritió parte de su muro.

Mana amarillo: *Liuväli külmutatud põrgu!!!*

El suelo comienza a congelarse en un área muy extensa (más allá del muro de hielo) y un poco de este comienza a subir a través de los pies del negro y el de fuego. El hecho de que la temperatura esté bajo cero ayudaba bastante a que fuese estable.

Mana rojo+negro: *Uisud saatanlik kurat!!!*

De repente, mana negro y rojo rodean los pies de Korven haciendo que aparezcan... unos patines. Muy bonitos, por cierto. Korven hace una pose de patinador antes de presentar su rutina y se lanza hacia Alison.

-Nothing to do here~♫ Tenemos que llegar hasta donde está Furukawa. No podemos atacar inocentes.- dice Korven mientras de un repentino movimiento atrapa a la menuda demonio y se la lleva cargando en sus brazos. -Si alguien nos ataca, contraatácalo o haz una barrera!

Korven brinca lo que quedaba del muro. Podría decirse que nació en patines como cualquier otro sueco, así que hacer movimientos que cualquier otra persona en el hielo no podría hacer era algo natural. Hacia donde se dirigiese Korven se formaba un camino de hielo.

-Ayquenomealcanceelvoladorquenomealcanceelvoladorquenomealcanceee...

Las acciones de Korven quedan perfectas para la ocasion y gracias a la tecnica utilizada con anterioridad habia logrado detener a uno de los peones y entretenido a otro. La velocidad era mucha a compracion de los ahora helados peones que probablemente no sentian el frio (debido a la posesion) pero sus cuerpos comenzaban a resentirlo.
- Creo que es mejor dejarlos... de todas formas no lograrán pasar al señor Evans... - dice el hombre de fuego, intentando ayudar a su amigo. - Es cuestión de tiempo para que recibamos la orden y los matemos a todos...

Los peones se van quedando atras mientras Korven y Alison se aproximan hacia la entrada trasera del edicio central. Lugar donde se encontraba la oficina de Keitaro Furukawa. Cual es su sorpresa que al acercarse, ambos sienten como todo el lugar comienza a distorsionarse a gran velocidad. Mientras que una pesada voz retumbaba en su cabeza.

"Alejense... no tengo tiempo para niños..." dice la voz y al estabilizarse su vision ambos ven que se encuentran en el campo de Mugby... a una distancia completamente contraria al edificio central...

Korven estaba completamente topless, no era como que le importara mucho, pero claramente no era su estilo. Normalmente usaría un bonito bordado lapón pero ya se había acostumbrado al uniforme de la escuela. Hubiera estado mejor tener algo arriba, simplemente no era su estilo, lo cual lo irritaba un poco, y lo irritaba más al ver que fueron transportados al campo de mugby. El nahual cancela el Absolut Zero, no tenía caso seguir enfriando la zona por donde estaban antes. El campo de mugby no estaba congelado, pero por donde patinara, aparecería una capa de hielo. No se desharía de los patines hasta saber que estaban seguros o si habría un enemigo.

-¿Crees que sea prudente que hagas un teleport hacia el edificio central?- le pregunta Korven a Alison, mientras patina en círculos alrededor de ella para congelar de poco en poco la pista sin tener que invocar nuevamente el hechizo. Se sentía tan bien patinando que hacía de repente una que otra piruetilla y hacía alguna pose exagerada para impresionar a Alison. -Si nos teletransportan una vez más, solo habrás gastado mana en vano. Ahora bien, podrías teletransportarnos a algún lugar intermedio, no tan lejano, y de ahí seguiríamos nuestro camino por nuestros medios.

Mientras Alison y Korven discutian son sorprendidos por un impactante relampago seguido de una pesada inseguridad que comenzaba a rodearlos. Era como si de repente les hubieran quitado parte de esa protección que sentian al llegar a las instalaciones.

Un siguiente relampago les hace ver a lo lejos a una mujer de cabello blanco y alas, corriendo con un oso de peluche en brazos. Se trataba de Adele Bloomwood quien parecia asustada en aquel lugar. Con cada relampago apretaba sus brazitos y tambien se encogía de hombros asustada.

Tras de ella, un poco lejos, por lo menos otros cinco miembros de la OMST parecían seguirla, disparando algunas bolas de fuego hacia ella.
- Kyaaaah!!!

El corazón de Korven se hace chiquito.

-ADEEEEELE!!!

Korven quería mucho a Adele, él no considera que tuviese algún mejor amigo, pero si tuviera que tener uno, la escogería a ella.

El chico patina a toda velocidad hacia Adele, esquivando las bolas de fuego. Estaba tan enojado que alcanza a Adele, y sin más, la protege con una barrera de hielo, poniéndose él al frente de los ataques.

Una bola de fuego va veloz hacia él, pero de manera automática, hace algo que solo había podido hacer una vez antes... externó su aura, haciendo rebotar la esfera hacia los miembros de la OMST, potenciada en su velocidad. Unos cuernos de luz azul celeste resaltan de la cabeza de Korven, mientras sus ojos brillan de igual manera. Su cabello era blanco y ondeaba con su propia energía. A pesar de que podía acabarse su mana más rápido así, ahora con Adele ahí se sentía más confiado. Un aliado de Sal siempre caía de maravilla.

Korven se eleva unos tres metros y mira a los miembros de la OMST hacia abajo. Tenía como una combinación de miedo y seguridad. Miedo porque era la segunda vez que se enfrentaba a un enemigo peligroso, aunque esta segunda parecía ser una verdadera cosa cosa seria. Seguridad, porque sabía que si se decidiera, podía cargarse a todos los peones de no ser que eran inocentes... pero eso ya no lo iba a detener. Los ojos de Korven denotaban ese deseo de venganza por haber atacado a Adele.

-No me tocaré el corazón para matar inocentes, en todo caso, alegaré defensa propia si es que aún se atreven a enviarme a un juicio. Huyan ahora, ríndanse, desaparezcan de mi vista... soy misericordioso, pero no lo pediré otra vez.- Korven levanta su dedo índice derecho y un destello de energía cian comienza a brillar. Era como tener una pistola apuntando a ellos, pero en realidad era hacia el cielo. Si alguien se atrevía a atacarlo, soltaría ese ataque de manera automática.

Korven sonríe con una mueca chueca.

-Esos tipos son unos obstinados- Decia Sergeii mirando con su ceño fruncido a los agentes que venia tras de el y Adele. Esquivaban muy apenas las bolas de fuego. Ahora el "chico" deseaba su anterior cuerpo. Asi se hubiera encargado de ellos y ya hubiera encontrado a la señorita Caroline.

La adrenalinade la persecucion se incremento en el al oir la voz de su viejo amigo. -damn, el mayor... No me hablea- le dijo en voz baja y sin moverse. No queria que todo el mundo se enterara de su retorno, no de esta manera. Miro el rostro de su amigo acercarse a defenderlos... Sin camisa; y luego bajo la cabeza como un peluche comun y corriente. Pero contento de verlo bien

No entendía mucho, pero lo importante era que ella estaba a salvo... o no?

"Ahi va un estudiante de Furukawa!" dijo uno de los miembros de la OMST hacia Adele mientras ella, insegura, comenzaba a desplazarse para otro lado. Cuando vió que eran ya una multitud y que comenzaban a dispararle ella comenzaba a huir a mayor velocidad.
- AAAY que esta pasando!? - dice la chica de pelo blanco flotando en dirección al campo de Mugby. No entendía si ella, pues, ya sabía que esto iba a suceder y tenia la protección de su novio.

Fue entonces cuando un oso cayó sobre su cara y soltó un grito. Como si las cosas no fueran suficientes el oso parecía moverse y hablar. Adele solo tenia la opción de seguir huyendo y gritando.

Cuando vió ayuda y que estos amablemente comenzaron a arremeter contra los soldados, tardó un poco para ver que se trataba de Korven y la chica de cuarto grado que siempre lo seguia. Su respiración estaba agitada y temblaba un poco.
- Chicos gracias! - dice Adele preocupada - No se que esta sucediendo...

Gracias a la habilidad de Korven y Alison y dignos miembros de Srad, logran vencer con gran facilidad a los soldados dejandolos inconscientes y sin ningun daño letal. La lluvia comienza a golpear mas fuerte al Instituto pero al menos el peligro ya habia cedido.

De pronto, una sombra aparece cerca de ellos... aun cuando no es una presencia hostil, en estos momentos no habia que confiar al 100 en los instintos....

Korven pasa su mano sobre su cabello blanco. De un movimiento de su brazo, decenas de flechas de hielo se forman detrás de él. Esta vez era algo diferente, no un soldadito común y corriente. No tenía un aura agresiva, pero no podía confiar en nadie.

Casi con la gracia de un ángel, Korven trata de identificar a la nueva persona pero no logra conseguirlo.

-Vale, ¿quién eres? ¿Eres un amigo o un enemigo?

- Sub directora desempleada - dice la sombra acercandose un poco - hasta donde recuerdo eso se considera amigo..

Caroline estaba ahi, rodeada de las flechas de hielo que aun flotaban a su alredeor.. Si no fuera que había pueso un escudo para no mojase tal vez no la hubiera contado.
- Joven Paalson, Bloomwood y Laurent.. que estan haciendo en medio del campo de Mugby? - pregunta ella cruzandose de brazos - El profesor Furukawa me envió un mensaje de texto que viniera a checar algo aqui... ?

Sinceramente no entendía mucho, pero peor estuvo la situacion cuando observa en el piso varios miembros de la OMST inconscientes.
- De acuerdo, eso si es raro... me pueden explicar que sucede aqui?